Más de 15 años de devoción ha demostrado Inés de la Rosa, quien se ha dedicado a vestir y arreglar la Virgen de la Candelaria, que está ubicada en la capilla del sector Potrerito en el municipio Los Salias.
De La Rosa cuenta que desde hace más de una década ella, junto a su esposo y familia han dedicado de su tiempo para vestir a la Virgen de la Candelaria, siempre con un amor y fe, “somos canarios y muy devotos a ella, eso viene de nuestros padres, que siempre le han tenido mucha fe y nosotros hemos seguido la tradición”.
Aun cuando no le ha otorgado un milagro, Inés cuanta que su amor y fe por la madre de Dios, en la aparición de la Candelaria, es espacial, “todos en mi familia e incluso mis vecinos somos muy creyentes de ella, sentimos que siempre nos cuida”.
Relató que todos los 2 de febrero, hacen la procesión, “la Virgen está ubicada en la capilla de La Candelaria, desde allí salimos, hasta el Pueblo de San Antonio, avenida Perimetral, Rosaleda y luego regresamos caminando hasta la Iglesia donde se haya designado hacer la misa de ese día”.
Destacó que son un grupo de vecinos, entre ellos Blanca Alegría, Julio Alegría, Luisa Borges, Tilde Zamora, “faltan algunos nombres, pero entre todos nos dedicamos a organizar la procesión y arreglarla lo más bonita, para celebrar su día, todos los años hacemos lo posible para que salga lo mejor posible, y demostramos nuestra devoción y amor por ella”.
Inés recordó una anécdota, que siempre está presente en sus memorias, “un día estando en la procesión una señora se paró al frente de la Virgen, se arrodilló y persignó, sentí una sentimiento de devoción y amor, que siempre recuerdo”.
Doreen Aile Oyon
