Son 16 horas diarias de ruido, de lunes a lunes. «Los únicos días que descansamos son los 25 y 31 de diciembre y los primeros de enero», narra un habitante de residencias Portofino, al referirse al ruido que genera una empresa de la zona.
El edificio está ubicado en plena zona industrial del Municipio Carrizal, junto a los galpones de una conocida fábrica de productos alimenticios.
«Ocurre casi todas las noches, cuando hay gandolas para descargar, prácticamente hasta las 10:00pm desde las 6:00am que arranca la jornada laboral», reseña el vecino.
Aseguran que no tienen día de descanso, «ellos trabajan de lunes a lunes. Aquí no se puede estudiar, ver una pelicula, leer un libro, tener a un enfermo y esto lleva 40 años».
«Estamos claros que ésta es una zona industrial, pero debería tener regulaciones con respeto a los horarios y nivel de decibeles del ruido que generan las empresa y lo principal, si esa fábrica estaba antes del edificio por qué dieron el permiso de habitabilidad», se pregunta.
«Estamos cargando con esta situación y no hay nadie que nos escuche», agrega otro de los habitantes, quien pide a las autoridades atender el reclamo de estas familias afectadas.
Redacción El Tequeño