Lo que otrora fue la acera de una de las principales avenidas de la ciudad de Los Teques, hoy día funge como estacionamiento de talleres mecánicos y locales comerciales ante la indiferencia de las autoridades.
«La avenida Víctor Batista es tierra de nadie», reseña María Pila, vecina de El Paso quien suele caminar por ésta vía.
Indica que a los peatones les toca caminar por uno de los canales de la avenida al estar «ocupada» la acera con los vehículos.
«Los talleres que quedan a la altura de las Residencias Miraflores, permiten que sus clientes utilicen la poca acera como estacionamiento, mientras nosotros – peatones- corremos el riesgo de ser arrollados», dijo.
Es poco lo queda de acera. La falta de mantenimiento hicieron desaparecer el paso peatonal, lo que queda son huecos y fracturas en el concreto que ponen en peligro a los usuarios.
Redacción El Tequeño
