Al menos ocho personas murieron y otras 21 permanecen desaparecidas en el sur de Brasil a causa de las intensas precipitaciones que afectan desde el lunes pasado el estado de Rio Grande do Sul, informaron este miércoles fuentes oficiales.
Los organismos de rescate han confirmado en las últimas horas tres nuevas muertes y han sumado tres personas a la lista de desaparecidos que había en la víspera.
Hasta el momento, 2.576 personas han tenido que abandonar sus hogares en 104 municipios de Rio Grande do Sul por las subidas del nivel de los ríos y las inundaciones, según el último boletín de Defensa Civil.
Las autoridades regionales están concentradas en el rescate de familias que se han quedado aisladas, en especial en el municipio de Candelária, ubicado a 200 kilómetros al oeste de Porto Alegre, y que se encuentra en estado crítico.
Rio Grande do Sul ha sufrido tres episodios de inundaciones y lluvias torrenciales desde el pasado septiembre, causados por ciclones extratropicales.
Estos fenómenos meteorológicos, que son raros en la región y se han visto agravados por El Niño, han causado más de 50 muertos y cuantiosos daños materiales en los últimos meses.
Los pronósticos meteorológicos prevén que las lluvias continuarán siendo intensas hasta el viernes, con volúmenes de precipitaciones que pueden llegar a los 300 milímetros en algunos puntos.
Se espera que en los próximos días las lluvias y el aumento del caudal de los ríos pongan en estado de alerta a la región metropolitana de Porto Alegre, la capital regional.