Armando Benedetti, ministro colombiano del Interior, admitió que ha sido adicto a las drogas y al alcohol, pero aseguró que la rehabilitación le ha permitido cambiar y que ahora es un mejor padre, esposo y amigo.
En una entrevista ofrecida a la revista Cambio, publicada este domingo, el exembajador en Venezuela y la FAO aseguró que ha estado dominado por esas adicciones en 27 de sus 57 años de edad. Recordó que ha sido sometido a dos procesos de rehabilitación: uno en 1995, que lo mantuvo 14 años alejado del consumo, y otro que emprendió en octubre del año pasado.
«A veces me da duro aceptarlo. A nadie le gusta decir que es un enfermo. Yo no quiero ser drogadicto. O sea, no quisiera ser adicto, y lo soy. Es una enfermedad…La adicción es una enfermedad, no un estigma«, aseguró Benedetti, según reseñó Efe
La confesión de Benedetti se conoce una semana después de que el excanciller colombiano Álvaro Leyva acusara al presidente Gustavo Petro de tener un problema de adicción a las drogas que, según dijo, constató él mismo durante una visita oficial del mandatario a Francia en junio de 2023.
Petro negó las afirmaciones de Leyva y aseguró que su única adicción es «al amor».
Benedetti señaló que su vida, en la actualidad, ha cambiado porque ha buscado ayuda para superar sus adicciones.
«Cuando usted se aleja de eso –y no estoy hablando contra las personas que toman–, la vida cambia, como me ha pasado en los últimos meses: mi vida ha cambiado para bien desde cualquier punto de vista. Desde cuando me acuesto hasta cuando me levanto. Mi tranquilidad y, sobre todo, lo más importante, la relación con mi esposa y con mis hijos», afirmó.
Reconoció que su nuevo proceso de rehabilitación coincidió con un diagnóstico de «un precáncer en el colon», lo que le dio «durísimo» pues «hasta ese día vivía como si cada día fuera el último».
