Una abrumadora mayoría de 143 Estados, de los 193 miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), volvió a pedir este viernes en la Asamblea General reconsiderar la integración de Palestina como Estado de pleno derecho, una decisión que compete al Consejo de Seguridad.
Solo nueve países votaron en contra, y 25 se abstuvieron, en esta resolución que fue copatrocinada por España, Irlanda, Noruega y Bélgica, junto a más de setenta países.
Al respecto, el embajador israelí, por su parte, sostuvo que el texto concede derechos y privilegios al futuro Estado terrorista de Hamas y sacó una pequeña trituradora de papel en la que metió una copia de la carta de la ONU acusando a los estados de destruirla.
La resolución aprobada por la Asamblea concede además a Palestina nuevas competencias que superan su estatus actual de «Estado observador no miembro» y que definen su participación en la Asamblea General, pero especifica que no contará con derecho a voto ni podrá presentarse como candidata a los organismos de Naciones Unidas.