La farmacéutica suiza Novartis confirmó que su medicamento asciminib logró una victoria en los ensayos clínicos contra el Bosulif de Pfizer, para tratar la leucemia mieloide crónica en pacientes para los que otros tratamientos dejaron de funcionar.
El asciminib produjo una tasa de respuesta molecular importante (MMR) a las 24 semanas que fue superior a la del medicamento rival ya aprobado de Pfizer, dijo Novartis, en un estudio de etapa tardía con pacientes adultos con leucemia mieloide crónica (LMC) positiva para el cromosoma Filadelfia que ya habían recibido al menos dos de los llamados inhibidores de la tirosina-quinasa (TKI).
Las personas con LMC vieron cómo el tratamiento se revolucionó hace 20 años con TKI como el Gleevec de Novartis y más tarde otros medicamentos que convirtieron la enfermedad mortal en una condición tratable en la que muchos pacientes tuvieron respuestas buenas y duraderas.
Sin embargo, muchos pacientes pueden llegar a ver el progreso de su enfermedad al resistirse al tratamiento, mientras que otros pacientes pueden no ser capaces de continuar la terapia debido a unos intolerables efectos secundarios.
“Estos resultados con el asciminib son un testimonio de nuestro compromiso de transformar aún más el cuidado de la LMC”, dijo John Tsai, el jefe de desarrollo de medicamentos de Novartis, añadiendo que los datos se presentarán en una próxima conferencia y se compartirán con los reguladores.
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