El canciller de Venezuela, Yván Gil, informó que el avión que trasladaba a la selección nacional de fútbol, la Vinotinto, despegó de Perú y que se dirige a Venezuela, después de horas de conflictos diplomáticos y deportivos luego del partido entre las selecciones de ambos países, disputado en Lima.
La agencia española EFE confirmó la versión de Gil, citando a autoridades aeroportuarias de la nación inca, y detalló que Petroperú y Terpel fueron las empresas que llenaron de combustible el depósito de la nave.
Horas antes, la Cancillería peruana lamentó lo sucedido con el avión, pero aclaró que “no ha dispuesto ninguna medida que prohíba el reabastecimiento de combustible de dicha nave” y que el avión “viene experimentando restricciones de abastecimiento de índole mercantil privado ajenas a la voluntad del Estado peruano”.
Esta misma versión fue detallada por el canciller quien afirmó que el país prometió derogar la resolución de PetroPerú, que impide a empresas del sector prestar servicios en tierra a los aviones matriculados en Venezuela.
El avión partió a las 3 de la tarde, hora de Lima, y se desconoce a que hora arribará la Vinotinto a Venezuela.
La salida de la Vinotinto se da horas después de tensiones entre ambos países debido a los actos de xenofobia y racismo que vivieron los miles de venezolanos que querían ir al Estadio Nacional de Lima para alentar a la oncena nacional.
Durante la mañana del miércoles el ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela, así como la Federación Venezolana de Fútbol estuvieron realizando reiteradas denuncias sobre la situación irregular que atravesó la Vinotinto y su cuerpo técnico cuando pretendían abandonar las tierras peruanas.