La Justicia electoral de Brasil prohibió este miércoles el uso de herramientas de inteligencia artificial (IA) para la producción de propagandas electorales destinadas a dañar la imagen de rivales políticos.
La nueva norma prevé la descalificación de las candidaturas de los políticos que divulguen «deep fakes» o contenido audiovisual generado por IA creado para menoscabar la imagen de un adversario.
La IA será permitida únicamente en los anuncios de campaña hechos para divulgar las candidaturas, pero se obligará a introducir una advertencia explícita de que el contenido fue generado con inteligencia artificial.
El presidente del Superior Tribunal Electoral (TSE), magistrado Alexandre de Moraes, destacó que es una de las normas electorales «más modernas del mundo», según un comunicado difundido por la corte.
El TSE también aprobó este martes otra norma que obliga a los proveedores de contenidos en internet a retirar inmediatamente los contenidos que incluyan noticias falsas, discurso de odio o contenidos antidemocráticos en época electoral.
Las grandes tecnológicas también tendrán que adoptar y hacer públicas las medidas que están tomando para evitar o reducir la circulación de «hechos notoriamente falsos o gravemente descontextualizados que menoscaben la integridad del proceso electoral».
La norma señala que estos proveedores pueden ser responsabilizados por vía civil y administrativa si se niegan a cumplir estas normas durante el período electoral.
Las nuevas reglas serán válidas a partir de las elecciones municipales que se celebrarán el próximo octubre.
En las últimas elecciones presidenciales, en 2022, el TSE creó una alianza contra la desinformación que contó con el apoyo de las principales redes sociales, aunque en algunos casos el tribunal tuvo que forzar a los proveedores a borrar noticias falsas.
La Corte Suprema mantiene abierta una amplia causa que está investigando una supuesta «red de desinformación» que habría operado en los últimos años a favor del ahora expresidente Jair Bolsonaro, líder de la ultraderecha, para erosionar la democracia y favorecerle en su campaña a la reelección. EFE