El canal humanitario y el corredor estudiantil que fueron habilitados desde hace más de dos años sobre el Puente Internacional Simón Bolívar, el cual conecta Villa del Rosario (Colombia) con San Antonio de Táchira (Venezuela), siguen operativos.
Tras el retiro de los contenedores ubicados en el puente que impedían el paso de peatones y automóviles, las autoridades venezolanas aseguraron que para el martes 5 de octubre se retomaría el intercambio comercial en la frontera colombo-venezolana. Sin embargo, esto no ocurrió, pues la frontera sigue cerrada y la GNB solo permite el paso a personas con casos excepcionales, particularmente «humanitarios».
El diario La Nación señaló que las autoridades venezolanas permitirán la reactivación peatonal una vez esté vacunada más de 70% de la población. La jornada masiva de inmunización continúa en las aduanas de los municipios fronterizos Bolívar y Pedro María Ureña.
El gobierno de Colombia informó que el paso de vehículos de carga por los puentes internacionales será efectivo después de una revisión técnica, necesaria debido al largo tiempo que han pasado con peso muerto.
La contenedores en los puentes internacionales Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander y Unión, ubicados en la frontera del estado Táchira, fueron puestos por el gobierno en 2019 para evitar que la oposición liderada por Juan Guaidó ingresara al país ayuda humanitaria, aunque las fronteras terrestres de Venezuela, en los estados Zulia, Táchira, Apure y Amazonas, ya permanecían cerradas desde hace varios años.
Se espera que los containers en el Puente Francisco de Paula Santander sean removidos el martes 8 de octubre, donde se daría inicio a la apertura comercial fronteriza, según informó el diario La Nación.
El medio señaló además que Jorge Arreaza visitará este jueves la frontera y estará participando el viernes en las actividades previstas en el puente del lado venezolano.
Hasta el momento, las autoridades no han informado el retiro de los contenedores del puente Unión.
Colombia, por su parte, tiene su frontera abierta con Venezuela desde el pasado 2 de junio tras mantenerla cerrada debido a la pandemia por cerca de 14 meses.
«Durante el cierre de la frontera con Venezuela, Colombia mantuvo los pasos humanitarios habilitados, priorizando aquellos menores que están adelantando estudios en Colombia, así como personas con discapacidad o que requerían atención en materia de salud», dijo Migración Colombia el pasado lunes.
Reiteró que el retiro de los contenedores permitirá consolidar el trabajo que ha adelantado el gobierno de Duque en materia de control y seguridad en la región para evitar que miles de migrantes y familias tengan que exponerse al pasar por sitios no autorizados.
El tránsito de personas se mantendrá bajo el actual sistema de pico y cédula implementado por la autoridad migratoria colombiana desde el mes de junio, con un horario de operación de 6:00 am a 4:00 pm.
«Adicionalmente, el presidente Iván Duque dio instrucciones para fortalecer el control en pasos regulares e irregulares, con presencia adicional de miembros de la Fuerza Pública y Migración Colombia», explicó el ente migratorio.
También están en marcha las coordinaciones con las diferentes entidades que operan el control fronterizo para una operación gradual y segura con protocolos de bioseguridad permanentes. El mecanismo previsto será similar al que actualmente se emplea en el paso de Paraguachón, en La Guajira.