La inseguridad, el bote de aguas sucias y el mal olor eran las principales quejas de los vecinos del Paseo Anauco, luego de que tres alcaldes de Caracas prometieran recuperarlo y ninguno cumpliera. Ahora llega Carmen Meléndez con la promesa de hacer «un gran trabajo»
La recuperación del Paseo Anauco no es una promesa nueva. Tiene al menos 22 años. Desde el año 2000 la Alcaldía de Caracas ha estado en manos de gobernantes afectos al gobierno y, a partir de entonces, planes de recuperación del Paseo Anauco, ubicado entre la avenida México hasta la Plaza La Estrella, han ido y venido, pero todos han quedado inconclusos.
En 2003, con Freddy Bernal en la Alcaldía Metropolitana, se anunció un plan de rescate, luego de que las lluvias de 1999 provocaran el desbordamiento de la quebrada Anauco. No pasó nada.
Diez años después, en septiembre de 2013, el entonces alcalde Jorge Rodríguez anunció el Plan Candelaria con una inversión de 73 millones de bolívares.
«Vengan para que vean la nueva plaza la Candelaria iluminada, con árboles, con espacios para nuestros abuelos, para nuestros niños, con el paseo Anauco recuperado»,dijo Rodríguez.
Entre las promesas de Jorge Rodríguez para el Paseo Anauco destacaban: una ruta de ciclovía, quioscos gastronómicos, parque para los niños, vigilancia e iluminación óptima; pero tampoco se vieron los resultados.
Después llegó a la Alcaldía de Caracas Érika Farías y tampoco se observaron cambios en este lugar, pese a que también se anunciaron trabajos de recuperación.
En la actualidad, con Carmen Meléndez también llegaron nuevas promesas para recuperar el Paseo Anauco. La almiranta recorrió el lugar el pasado 23 de marzo para conocer las condiciones de esos espacios y por medio de Twitter dijo: «Pronto estaremos rehabilitando para el bienestar del pueblo caraqueño y de quienes nos visitan».
Añadió que tomaron nota de las sugerencias de los vecinos para aprovechar los espacios y prometió hacer «un gran trabajo».
TalCual recorrió el Paseo Anauco y pudo comprobar que las primeras acciones de trabajo se iniciaron. Contrario a cómo lucía el lugar a finales de año 2021, cuando se evidenciaban botes de aguas sucias, acumulación de basura, falta de luminarias, inseguridad, entre otras fallas, esta vez luce limpio, pero desolado.
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