José Manuel Prado Amasifuén, un comerciante de origen peruano, fue condenado a 30 años de prisión, tras ser hallado culpable de violar a seis adolescentes entre 15 y 17 años de edad en Los Teques.
La madre de una de las víctimas denunció al sujeto de 45 años ante el Cuerpo de Investigaciones, Científicas, Penales y Criminalistas que abrió la respectiva averiguación, reseñó Diario Avance.
La mujer contó que su hija se encontraba por las adyacencias de la plaza Guaicaipuro, cuando fue abordada por el individuo quien le ofreció empleo.
La menor accedió a una entrevista de trabajo y se fue con el hoy sentenciado hacia el restaurante de un hotel de esta ciudad. Al ingresar, le brindó un refresco y luego la invitó a una de las habitaciones.
La muchacha al notar algo extraño intentó escapar, pero él la sujetó fuertemente, la lanzó a la cama y abuso sexualmente de ella.
Con todos estos datos recabados continuaron las labores de investigación que pudieron determinar que el hombre atacó a cinco chicas más a quienes además de ultrajarlas sexualmente, las golpeó y les robó sus teléfonos celulares.
Las jovencitas también denunciaron y finalmente lo capturaron. La Fiscalía 12ª ratificó la acusación por los delitos de violencia sexual agravada y violación agravada.
El Tribunal Segundo de juicio dictó la pena máxima que cumplirá la pena en el Centro de Formación del Hombre Nuevo Simón Bolívar, ubicado en El Paraíso.