Un nuevo caso se suma a la lista de robos que investiga la policía, ejecutados por un hombre que presuntamente seda a sus víctimas, la mayoría comerciantes de los Altos Mirandinos, para despojarlas de dinero.
En este caso se trató de una mujer que labora en al sede de Cáritas en San Antonio de los Altos. Una compañera narró que el hombre llegó pidiendo ayuda porque su nieta se había quedado encerrada en el apartamento y necesitaba pagar un cerrajero.
«Le dijo a mi compañera que le permitiera entrar, que él conocía los médicos que aquí laboran, al ingresar le comenzó a mostrar unas fotos de la supuesta nieta y es cuando la tocó», narró.
«Le ordenó que le diera 120 $ y ella, sin dudarlo, se los entregó. Al irse, le pregunté si lo conocía y fue cuando ella cayó en razón, la había robado», agregó.
El sujeto quedó grabado en las cámaras de seguridad tanto al ingresar como al salir del referido centro de salud, ubicado al lado de la iglesia de San Antonio.
Al igual que el caso reseñado ayer, el hombre utiliza la misma historia para lograr conectar con la víctima la cual, tras tocarla, hace lo que él pide.
«Usa alguna sustancia, podría ser burundanga», agregó otra de las víctimas. Son varias denuncias las que ha recibido la policía, tanto en Los Salias como Guaicaipuro.
Además, algunas personas, indican que el sujeto tiene las mismas características que el hombre que hace unos meses usaba el mismo modus operandi.
Redacción El Tequeño