La cuarentena por el Covid-19 ha representado para muchos comerciantes la estocada final. Tiendas de ropa, calzados, librerías e incluso ferreterías contabilizan más de 60 días cerrados y sin esperanzas de volver a abrir.
La crisis económica, producto de la devaluación del Bs, ya había liquidado a cerca del 40 % de los comercios ubicados en los principales centros comerciales de los Altos Mirandinos, la pandemia terminó de asfixiar a los que quedaban.
«Ya estábamos mal antes del virus, no hay forma de volver a abrir si se sigue alargando la cuarentena», sentencia David López, propietario de una zapateria en el centro comercial La Casona.
Critican que aunque Venezuela tiene el mismo tiempo de confinamiento de España, donde además se han registrado un número elevado de contagiados y muertos, «allá se estén abriendo los comercios, cumpliendo medidas de seguridad, y aquí se radicalice».
«En Europa ya se puede ir a un restaurante y, respetando las distancias y cumpliendo los protocolos, poder comer, aquí solo podemos vender para llevar», reseñó Alberto Vargas, encargado de un restaurante ubicado en la Recta de Las Minas.
Asegura que el delivery no genera ingresos para mantener al personal, «esas ventas no representan ni el 5 % de lo que facturamos normalmente, esto está dejando sin trabajo a miles de venezolanos», sentencia.
Otros han decidió cambiar de rubro y ahora vender alimentos o productos de higiene para poder mantenerse abiertos.
Redacción El Tequeño
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