La mayoría de las personas habrán tenido conjuntivitis alguna vez en la vida. Suele presentarse como una secreción pegajosa, acuosa o espesa alrededor del ojo, acompañada de comezón y enrojecimiento.
La conjuntivitis es descrita como la inflamación del tejido delgado que cubre la parte frontal del ojo y la parte posterior de los párpados. A este tejido se le llama conjuntiva y ayuda a proteger el ojo y a mantenerlo húmedo. Existen varios tipos de conjuntivitis, pero la causa más común es debido a una infección o un virus.
Según el último informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la visión, esta es una de las principales razones por las que las personas acuden a los servicios de atención oftalmológica en todos los países.
La conjuntivitis bacteriana es causada por la infección de ciertas bacterias en el ojo. Es más infrecuente que los cuadros virales y, al igual que éstos, puede afectar a ambos ojos.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) Las bacterias que más frecuentemente causan conjuntivitis bacteriana en América son las siguientes:
– Staphylococcus aureus
– Haemophilus influenzae
– Streptococcus pneumoniae
– Moraxella catarrhalis
Los síntomas usualmente empiezan en uno de los ojos si la afección la causa un virus o bacteria y podría presentar otros síntomas de infección, como dolor de garganta y fiebre.
Los signos más comunes suelen ser: enrojecimiento en la parte blanca de su ojo, comezón en su ojo o alrededor de su ojo, sensación que tiene algo dentro del ojo, secreción pegajosa, acuosa o espesa, párpados con costra cuando se despierta en la mañana, ardor, escozor o inflamación en su ojo y dolor cuando ve la luz brillante.
Los CDC también mencionan que lo indicado para la conjuntivitis bacteriana es la terapia antibiótica tópica. Por lo que sería esencial consultar su estado con un profesional de la salud si presenta alguno de los síntomas mencionados.
¿Cómo tratarla?
Aunque parece una afección común y fácil de tratar, es importante recibir un tratamiento adecuado y oportuno. La Sociedad Española de Oftalmología, menciona que las conjuntivitis bacterianas son extremadamente contagiosas, sobre todo las virales.
Las partículas víricas son capaces de sobrevivir en superficies secas, como sábanas, almohadas, toallas, utensilios del baño, etc., durante semanas. Las principales vías de contagio son el contacto directo con secreciones respiratorias y oculares, así como el contacto de manos. La infección puede ser esporádica o producirse en brotes epidémicos en centros de trabajo, escuelas, centros deportivos, piscinas, etc.
Respecto a la atención sanitaria en ofmatología, la OMS puso de manifiesto en su informe que el envejecimiento de la población, los cambios en los estilos de vida y el acceso limitado a la atención oftalmológica, en particular en los países de ingresos bajos y medios. Esos son algunos de los principales factores que impulsan el aumento del número de personas con afecciones de la vista, dentro de las que se contempla la conjuntivitis.
«Las afecciones oculares y la deficiencia visual están muy extendidas, y con demasiada frecuencia siguen sin ser tratadas», afirma el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General de la OMS. «Las personas que necesitan atención oftalmológica deben poder recibir intervenciones de calidad sin sufrir dificultades financieras. Incluir la atención oftalmológica en los planes nacionales de salud y en los conjuntos esenciales de servicios es una parte importante del camino de cada país hacia la cobertura sanitaria universal» concluyó.
Así podrá tratar la conjuntivitis
De acuerdo con la Clínica Mayo, el tratamiento para la conjuntivitis suele enfocarse en el alivio de los síntomas. El médico puede recomendarte usar lágrimas artificiales, limpiar los párpados con un paño húmedo y aplicar compresas frías o tibias varias veces al día.
Si usa lentes de contacto, debe dejar de usarlos hasta completar el tratamiento. Además, puede preguntarle al médico si debe desechar y reemplazar los accesorios de los lentes de contacto, como el estuche.
En la mayoría de los casos, no necesitará antibióticos en gotas para los ojos. Como la conjuntivitis generalmente es viral, los antibióticos no ayudarán y hasta pueden causar daño al reducir su eficacia en el futuro o provocar una reacción al medicamento. En cambio, el virus necesita tiempo para seguir su curso, hasta dos o tres semanas.
Los medicamentos antivirales pueden ser una opción si el médico determina que la causa de la conjuntivitis es el virus del herpes simple.