Cómo lamentable, así califican los sanantoñeros las condiciones de abandono en la que se encuentra la piscina de la UTAL (Universidad de los Trabajadores de América Latina), localizada en Los Salias.
Lo que otrora fuera la piscina más importante de la zona, en la que cientos de personas aprendieron a nadar, hoy está convertido en un pozo de agua estancada.
«Da dolor en lo que convirtieron la UTAL, dejaron perder la piscina, sino fuera por el Complejo Recreativo Cultural y Deportivo de Los Salias que administra la Alcaldía no habría donde practicar esa disciplina», dijo una atleta.
Aseguran que el declive comenzó en junio de 2016, cuando de forma arbitraria a través de una carta, el Ministerio del Poder Popular para la Comunas solicitó los espacios por razones sociales.
Más de 300 chamos de la escuela de fútbol Juan Arango se vieron afectados al quedar sin donde poder practicar. La piscina dejó de recibir mantenimiento hasta convertirse en lo que es hoy día.
Redacción El Tequeño