Frente a lo sucedido en el seno de la Asamblea Nacional en víspera de Año Nuevo, tenemos que poner el foco de atención en todo lo relativo a la elección primaria de la oposición. Hemos dicho que en un Estado normal cuando hay discusiones, opiniones contrapuestas sobre interpretaciones constitucionales, le corresponde a los Poderes Públicos acudir a la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), porque tiene la facultad de interpretación.
Pero si no hay esa posibilidad, porque nos encontramos en un Estado fallido donde también el TSJ está usurpado, se recurrió a la consulta ciudadana y allí hubo la mayor expresión que ha existido en las últimas décadas, no solo del Bloque Constitucional, la Federación de Abogados de Venezuela con sus colegios de abogados, individualidades, etc. Recordemos que una ley, una reforma legislativa, de acuerdo al reglamento, va a una consulta pública. Dentro del lapso de la consulta estas personas que han dedicado su vida y es la reserva moral del sector justicia en el país se expresaron en rechazo a la propuesta que se impuso, pero lamentablemente un grupo de parlamentarios ignoró esas opiniones y por el contrario hubo unas expresiones infelices, sin nombrar a alguna en especial. En este punto, quiero a nombre del parlamento, porque siempre he tenido respeto por las personas que han dedicado su vida a la justicia, expresar mis disculpas en mi condición de diputado por el trato indebido contra el doctor Román Duque Corredor, solo por dar su opinión jurídica sobre la ilegal propuesta, olvidando que es una figura del derecho no solo para Venezuela sino para todo el continente y también para Europa. Doy un reconocimiento a él, porque lo respeto. Por cierto, de sus manos recibí la presidencia del Colegio de Abogados de Caracas después que gané un proceso electoral. Duque Corredor es un maestro y una persona digna de todo respeto, repito. Por eso aprovecho la ocasión para hacer pública mis palabras de solidaridad hacia él.
No fue suficiente tal afrenta contra el doctor Duque Corredor para estos parlamentarios que tenían una mayoría circunstancial, que en definitiva no podían ir contra una norma constitucional como hicieron, lo cual ha provocado un necesario cambio de rumbo en la búsqueda de la unidad, que está cifrada en que la Asamblea Nacional siga su camino con el apoyo de la comunidad internacional y poder concretar la realización de un proceso electoral presidencial libre y transparente, empezando por el proceso de primaria que otorgará emponderamiento y legitimación al líder del sector democrático que va a tener bajo su responsabilidad la reconstrucción del país. Ese líder debe estar blindado con un programa, que es la agenda que ya tiene la Comisión Nacional de Primaria, que goza del reconocimiento del país y que está haciendo un excelente trabajo. Y también requiere de un elemento indispensable en este proceso que es que haya un acuerdo de gobernabilidad. Son por lo tanto vitales un programa y un acuerdo de gobernabilidad.
En ello es que tenemos que trabajar sin desmayo y por mi parte me comprometo desde mi curul y junto a otros colegas en la Asamblea Nacional, porque he conversado con muchos de ellos, a velar por el resguardo de nuestros activos en el exterior. Y también en apoyar desde allí a la Comisión Nacional de Primaria en todo lo que sea necesario. Mi llamado a todos los parlamentarios es para que nos reunamos con la Comisión Nacional de Primaria, para colocarnos a su servicio y apoyarla, por ser la mejor vía que tiene la expresión ciudadana que es la que tiene en su poder la soberanía popular. Por lo tanto, la verdadera unidad está ahí y por el ciudadano.
Algo importante: la unidad tiene que convergir con la constitución. Los cuerpos colegiados tienen cambios permamentes, pero sus decisiones nunca pueden ir contra los principios constitucionales, que fue lo que sucedió. De tal forma que debemos recomponer esta situación que significa ir al encuentro de los ciudadanos del país, para que con las bases constitucionales sostener la reconstrucción de la unidad.
Dificultades van a aparecer en esta fase, pero es obvio que el único orden de sustento que tiene hoy la república es la Asamblea Nacional y no me refiero a la electa de forma fraudulenta en 2020, sino a la legítima de 2015. Y desde allí vamos a estar trabajando en lo que nos corresponde en forma prioritaria, que es la defensa de los activos que son de los venezolanos, de nadie más. Vamos a estar muy pendientes de lo que vaya a suceder en todo lo relacionado a ello, para atender a nuestra obligación contralora que tenemos como diputados nacionales electos por el pueblo.
Aprovecho la oportunidad para dar también reconocimiento al Procurador General del gobierno interino de Juan Guaidó, el doctor Enrique Sánchez Falcón, que junto a muy pocas personas llevó adelante de manera exitosa esa importante misión, porque esos activos que están en el exterior son el soporte financiero que va a tener el gobierno de unidad nacional, una vez ganemos el proceso presidencial que ponga fin a la tiranía. Así como Europa se reconstruyó tras la Segunda Guerra Mundial con el Plan Marshall, con una inversión de 60 mil millones de dólares, a juicio de Transparencia Internacional, el producto de la corrupción del régimen que está regado por todo el mundo se ubica en el orden de 600 mil millones de dólares y nos corresponde iniciar nuestro proceso de reconstrucción nacional con esos activos.
El presidente Guaidó ha insistido y nosotros lo hemos acompañado en la necesidad de volver a la constitución y así seguiremos de manera permanente, por ser nuestro deber salir a la defensa de esos activos con el apoyo de los venezolanos en el mundo.
Nuestro juramento. cuando hablamos del parlamento y la unidad, es ante la constitución y en lo que es la defensa de los derechos fundamentales de los ciudadanos, porque todo en definitiva descansa en ellos y esa es nuestra irrenunciable misión. Y de ahí es que hemos condenado cualquier interés partidista o personalista, así como los desvaríos, insensateces y negaciones de lo legal que nosotros hemos encontrado.
Para salir adelante tenemos que hacer uso de una visión prospectiva, es decir, manejarnos con las oportunidades que tenemos y evitar los riesgos y errores para alcanzar nuestros objetivos de cara al futuro, que son los de devolver el progreso a Venezuela y dar la calidad de vida que merecen los habitantes de nuestra nación.
Mi mensaje final para los ciudadanos no puede ser otro que el de la esperanza y el de no claudicar frente a lo que podemos sentir o percibir como un revés. Quiero que sepan que nosotros no nos rendiremos jamás y no les vamos a fallar. Ustedes cuentan con nosotros y nosotros contamos con cada uno de ustedes. Así unidos, cosecharemos solo victorias.
Dr. Rafael Veloz García, diputado a la Asamblea Nacional y al Parlasur electo en 2015; expresidente de la Federación Interamericana de Abogados (FIA); miembro de la dirección nacional de Voluntad Popular, VP.