El compromiso político de dedicar 500 000 millones de dólares al año para financiar la aceleración de los Objetivos de Desarrollo Sostenible fue adoptado este lunes 18 en la Cumbre sobre los ODS, que líderes del mundo desarrollan en el preámbulo de la 78 Asamblea General de las Naciones Unidas.
La declaración política que destaca esa decisión, “puede cambiar las reglas del juego para acelerar el progreso de los ODS”, dijo el secretario general de la ONU, António Guterres, al saludar la adopción del texto en el primero de los dos días de la cumbre.
La cumbre fue convocada por Guterres como un foro político de alto nivel para dar un nuevo impulso a los ODS, adoptados en el marco de la ONU en 2015 y que, a mitad de camino hacia su año objetivo, 2030, muestran considerables rezagos en el cumplimiento siquiera parcial de sus metas.
La nueva declaración dio apoyo a la búsqueda de al menos 500 000 millones de dólares anuales adicionales de aquí a 2030 para favorecer los ODS, y en paralelo reclamó “un mecanismo eficaz de alivio de la deuda” de los países en desarrollo.
Los ODS contienen metas en materia de fin de la pobreza, hambre cero, salud y bienestar, educación de calidad, igualdad de género, agua limpia y saneamiento, energía asequible y no contaminante, trabajo decente y crecimiento económico, industria, innovación e infraestructura, y reducción de las desigualdades.
También para lograr ciudades y comunidades sostenibles, producción y consumo responsables, acción por el clima, vida submarina, vida de ecosistemas terrestres, paz, justicia e instituciones sólidas, y alianzas para lograr los objetivos
De las 169 metas contenidas en los 17 ODS, “solo 15 % están en camino, mientras que muchos van en reversa”, advirtió el secretario general.
En su discurso ante la cumbre, Guterres destacó la necesidad de actuar en seis áreas críticas, comenzando por abordar el hambre, que calificó como “una mancha espantosa en la humanidad y una violación épica de los derechos humanos”.
“Es una acusación para cada uno de nosotros que millones de personas pasen hambre hoy en día”, añadió.
También el presidente de la Asamblea General de la ONU, el trinitobaguense Dennis Francis, advirtió en sus palabras que ocho por ciento de la población mundial pasará hambre en 2030, y se preguntó: “¿Podemos aceptar eso?”.
Otras dos áreas destacadas por Guterres fueron las de energías renovables, en la cual “la transición no se está produciendo lo suficientemente rápido”, y la de la digitalización, “cuyos beneficios y oportunidades no se están difundiendo con amplitud suficiente”.
Al mismo tiempo, “demasiados niños y jóvenes en todo el mundo son víctimas de una educación de mala calidad o de ninguna educación”, continuó, y luego destacó la necesidad de trabajo decente y protección social.
Dijo que en el mundo deberían crearse ahora 400 millones de “nuevos empleos decentes” y la protección social alcanzar a otras 4000 millones de personas, la mitad de la población del planeta.
Finalmente, Guterres pidió “el fin de la guerra contra la naturaleza” y abatir “la triple crisis planetaria” caracterizada por el cambio climático, la contaminación y la pérdida de biodiversidad.
“Un aspecto transversal de todas estas transiciones es la necesidad de garantizar la plena igualdad de género. Ya es hora de poner fin a la discriminación, garantizar un lugar en cada mesa para las mujeres y las niñas y poner fin al flagelo de la violencia de género”, afirmó Guterres.
En medios de la cumbre se indicó que más de 100 países presentarán compromisos nacionales para la aceleración de los ODS, que incluyen transiciones prioritarias y áreas de inversión, estableciendo puntos de referencia nacionales para reducir la pobreza y la desigualdad, y fortalecer los marcos institucionales.
A-E/HM