El fracaso del chavismo en las elecciones de la UCV es un claro indicador de su debilitamiento y la falta de credibilidad ante una nueva generación que en sintonía con la totalidad del país busca cambios significativos en la nación.
Este hecho no solo refleja el declive del movimiento estudiantil «rojo», sino que también es un claro indicio del cambio de paradigma político, económico y social que enfrenta Venezuela tras la debacle de las propuestas económicas y sociales del actual gobierno y modelo, el cual enfrenta un creciente rechazo popular.
Las elecciones del pasado viernes en la Universidad Central de Venezuela (UCV) dejaron al descubierto la profunda crisis que atraviesa el liderazgo chavista general y en especial el estudiantil, evidenciada por la notable derrota de los representantes Héctor Rodríguez y Ricardo Sánchez.
Estos dos personajes, históricamente vinculados al chavismo, han sido responsables de la liquidación de lo que quedaba del liderazgo estudiantil en la principal universidad del país.
En estas elecciones, solo se presentaron los candidatos opositores Miguel Ángel Suárez y Ángel Rodríguez, mientras que “La Revolución” chavista no logró ni siquiera presentar una plancha competitiva.
Héctor Rodríguez, quien fue tutelado por Hugo Chávez debido a su liderazgo en la UCV con su movimiento PIE, ha visto cómo su capacidad de movilización se ha desvanecido totalmente.
Hoy en día, se le ha tildado de burócrata alejado de las bases estudiantiles, disfrutando de una vida acomodada, mientras de Ricardo Sánchez han indicado que ‘ha traicionado tanto a la oposición como a los venezolanos por unos pocos beneficios personales, convirtiéndose en un “enchufado” del gobierno’.
La situación es alarmante para el chavismo, que ahora se pregunta:
¿qué pasó con Héctor Rodríguez y Ricardo Sánchez?
La falta de coherencia, rectificación y cambio así como y el alejamiento de las realidades universitarias les han llevado a una pérdida significativa de espacio y liderazgo en el ámbito estudiantil.
Ambos personajes han fallado en conectar con una generación que busca alternativas a la crisis que atraviesa el país.
La gestión de Rodríguez como gobernador de Miranda fue tan deficiente que tuvo que ser removido de su cargo antes de completar su período.
Sin embargo, en lugar de enfrentar las consecuencias de su mala administración, Nicolás Maduro lo premió con el Ministerio de Educación, mientras que Ricardo Sánchez asumió el Ministerio de Educación Superior.
A decir de muchos, los resultados de las recientes elecciones en la UCV, la principal universidad del país muestra claramente el rechazo a las ideologías de izquierda que domina el país.
