La presidente del partido Encuentro Ciudadano presentó una encuesta del Observatorio Venezolanos de Seguridad Alimentaria y Nutrición, que revela que en 70 por ciento de los hogares no se consume carne de res.
El 69,1 por ciento de los hogares venezolanos viven en seguridad alimentaria marginal, cuyos ingresos solo les alcanza para el consumo mínimamente adecuado de alimentos y sacrifican otras necesidades básicas, como la salud o la educación.
La cifra fue revelada en la encuesta que elaboró el Observatorio Venezolanos de Seguridad Alimentaria y Nutrición a 2.041 hogares del país entre diciembre de 2020 y febrero de 2021, a través del trabajo ejecutado por las comisiones técnicas de la Comisión Especial de Justicia y Paz.
El informe indica que solo el 9% de los venezolanos goza de una seguridad alimentaria plena, capaz de suplir sus necesidades alimentarias y no alimentarias esenciales, sin la necesidad de aplicar estrategias de sobrevivencia. Mientras que 17,3% vive con una inseguridad alimentaria moderada y 4,3% con inseguridad alimentaria severa.
Delsa Solórzano, presidente del partido Encuentro Ciudadano, presentó el estudio que demuestra que 90,7 por ciento de los hogares en Venezuela presenta dificultades para alimentarse.
“Existen hogares que no consumen nunca carne de res. 70 por ciento de los hogares encuestados no consumen carne de res”, recalcó la defensora de derechos humanos en una rueda de prensa. En la que además precisó que los estados con mayor inseguridad alimentaria son Amazonas (83.3%), Apure (52,9%), Falcón (52,9%), Delta Amacuro (50,0%) y Yaracuy (40,4%).
La encuesta arroja que la dieta del venezolanos se caracteriza por el consumo de carbohidratos (98.9%), grasas (84,4%), azúcares (83,9%) y tubérculos (79,5%). “Los tubérculos son sembrados por las mismas familias en sus casas”, dijo Solórzano.
El estudio del Observatorio también reveló que la mayoría de los hogares venezolanos usan estrategias para enfrentar la crisis alimentaria, como hacer trueques por alimentos; enviar a familiares a comedores comunitarios; reducir gastos de salud y educación; vender bienes del hogar o activos productivos; aceptar empleos riesgosos; pedir dinero en la calle; buscar comida en la basura; “incluso, cambiar sexo por comida”, dijo Solórzano.
Resaltó que en la encuesta se determinó que 50 por ciento de los consultados camina para ahorrase los pasajes y usar ese dinero para alimentarse.
La presidente de la Comisión Especial de Justicia y Paz celebró el plan del Programa Mundial de Alimentos (PMA) para brindar alimentación a 180.000 niños venezolanos. Dijo que no es suficiente, pero que es primordial, necesaria e imprescindible.
“Cualquier solución (definitiva al tema del hambre) pasa por la libertad de Venezuela, porque la principal causa es Nicolás Maduro”, dijo la defensora de DDHH, quien recordó que el chavismo acabó con el aparato productivo nacional con las expropiaciones y confiscaciones de empresas productoras de alimentos, e incrementó la inseguridad alimentaria.
Solórzano explicó que el estudio servirá como complemento e insumo para que «la Comisión de Justicia y Paz tenga a mano un diagnóstico sobre el tema y desarrolle políticas públicas para tener una transición en paz y con comida en la mesa de los venezolanos».
*Otras cifras:* 74% de la población busca sus alimentos a diario, porque tienen poco dinero.
76 % comió alimentos menos preferidos o más baratos.
58% redujo el tamaño de las porciones.
56% de los venezolanos gastan sus ahorros para comprar alimentos.
55% de los encuestados ha dejado de comer.
51% pidió alimentos o dinero para comprarlos.
44% trabaja con pago de alimentos.
43% reduce los gastos médicos y de educación para comer.
17% acepta empleos de alto riesgo para poder comer.
Redacción El Tequeño