Omar Álvarez se quedó sin vivienda luego que las autoridades municipales, por seguridad, derribaran el kiosco que por 35 años fungió como su hogar.
Ubicada en el sector El Cabojate, la estructura resultó afectada por un deslizamiento de tierra ocurrido en octubre de 2023 tras las lluvias.
Hace unos meses mandaron a desalojar locales que estaban activos en la zona por considerar que estaban en riesgo.
Marvis Misler, concejal de Guaicaipuro, denunció que tras un año la alcaldía está removiendo la tierra de la vía y pidieron al hombre retirar sus cosas porque demoleran el kiosco.
«Esto implica que el señor Omar queda a la deriva, porque eso es su residencia. Pedimos a las autoridades dar cumplimiento a la Ley Orgánica para la Atención y Desarrollo Integral de las Personas Adultas Mayores de Venezuela, garantizando al señor Omar una vida digna», dijo.
Misler agregó que se le debe garantizar la restitución de su vivienda y espacio de trabajo, «ya que sabemos que la alternativa que le dieron fue irse a un refugio, cuando sabemos que las condiciones de vida en los refugios no garantiza calidad de vida ni la posibilidad real de tener acceso a una vivienda», puntualizó.
Redacción El Tequeño