Para William Anseume, coordinador municipal en Guaicaipuro de Vente Venezuela, en Los Teques varios derechos han sido vulnerados aprovechándose de las condiciones necesarias para contener la propagación del Covid-19.
«El del tránsito, ya lo sabemos: no circular con vehículos, no al transporte público, no salir luego del medio día; el de la información: no se conoce lo que ocurre en los hoteles destinados para recluir casos posiblemente sospechosos de contagio: ¿Cuál personal trabaja allí? ¿Son cubanos? ¿A ellos sí les pagan bien, les dan la comida y los necesarios implementos protectores, como tapabocas, jabón, indumentaria adecuada y agua de las que carecen los otros centros de salud y su personal en el municipio? ¿Reportan la casos debidamente o administran a conveniencia la información? ¿Hay acceso a la prensa no oficial, o tenemos que contentarnos con la información que se oficializa?».
Varios organismos vinculados con los Derechos Humanos – agregó Amseume – se han hecho eco de la problemática generada por el tratamiento de la ciudadanía durante la pandemia y la cuarentena en países donde rige el autoritarismo, como en Venezuela. «Esta realidad de opresión se puede captar con mucha eficiencia en Los Teques y todo el municipio Guaicaipuro, donde el rigor del control ciudadano ha ido escalando un aumento insoportable, rodeado de imposiciones, de atropellos, de silencios y malos tratos».
Ahora, prosiguió el profesor y dirigente político de la entidad mirandina, «les ha dado por encerrar con más rigor a los ciudadanos de los sectores donde se han descubierto casos. En lugar de incrementar las pruebas, de dotar hospitales y ambulatorios y dar el tratamiento humano que un enfermo y los posibles contagiados merecen, les da por estigmatizar al individuo y su sector. Causando desasosiego. Lo que evitará la manifestación voluntaria de decir que se tienen los síntomas y la información indispensable para atacar debidamente los contagios».
Finalizó asegurando que el sometimiento, la fuerza pública, el límite al máximo de los derechos, o su conculcacion plena, no mejorará la situación sino por el contrario generará efectos muy negativos. «No es la represión sino el debido tratamiento y la información, los exámenes realizados por el personal médico adecuado, lo que contendrá la propagación. El terror traerá el inconveniente de propiciar más silencio negativo en torno a un asunto tan delicado y de tan alta trascendencia para el país».
Redacción El Tequeño
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