El coordinador de Vente Venezuela en el municipio Guaicaipuro, William Anseume, aseguró que la desidia y el olvido caracterizan en estos momentos las parroquias San Pedro y El Jarillo.
Anseume, en el marco de la gira denominada «Guaicaipuro por la libertad», aseguró que «nuestros coterráneos se los está devorando, literalmente, la inflación y las innumerables necesidades. Esto tiene que revertise de inmediato», dijo.
En esta visita – reseñó – tanto a San Pedro, como a Pozo de Rosas y El Jarillo he podido constatar, con mi equipo de Vente Paracotos, lo consabido: la miseria, la inmensa precariedad que se ha profundizado muy hondamente. No sólo hay hambre y necesidad manifiesta. Hay un descuido insoportable en todos los servicios: el gas urge, la comida que creen rematar desde la Alcaldía resulta impagable con los suelditos, falla el agua por las tuberías, la luz y el transporte. La vialidad está destruida, la atención de la salud y la educación son sólo quimeras descuidadas de nuestro municipio Guaicaipuro».
«Han destruido desde el poder, con inmensa dejadez, pueblos productivos de alimentos, de flores, de frutas, de dulces. El agro de estas montañasno se puede desarrollar de este modo, sin insumos, sin una vialidad adecuada que permita el transporte eficiente. Aquí se acabó el turismo y cualquiera otra posibilidad de desarrollo ha sido cancelada de raíz por el régimen».
«Sin embargo, hay mucha energía contenida en gente laboriosa y con pundonor. Se ve que hay herramientas humanas que resisten el embate y que se repondrán muy pronto, al producirse el cambio esperado, para desarrollar nuevamente el agro y el turismo. Las fortalezas mayores de esta gente que confían mucho en ellos mismos, como es lógico ante este potencial, y en su tierra, como nosotros», señaló el coordinador de Vente Venezuela en el municipio Guaicaipuro.
Dijo que están conscientes de que «solos no podremos, pero con la ayuda externa seremos capaces de salir de esto, de reconstruirnos y de hacer de estos hermosos pueblos: San Pedro, Pozo de Rosas y El Jarillo, el proyecto que eran, el de máxima producción de flores, de hortalizas, de frutos y de un turismo nacional e internacional de primera calidad».
» El municipio Guaicaipuro y su gente, bien atendida en sus profundas necesidades, tienen un enorme potencial para desarrollarse, para brindarle al país y darse así mismos la vida digna que todos merecemos. Tengo mucha confianza en eso», reseñó Anseume.
Daniel Murolo
