«Aguantamos con fuerza, con pasión y esperanzas. Apostamos, como a lo largo de nuestra historia, por el periodismo balanceado, identificado con las comunidades, dándoles espacio a los orientales para expresar sus alegrías, logros, sueños y pesares. Sostuvimos nuestro periódico en aguas adversas, cada vez más salvajes», así anunció este martes el diario El Tiempo, con sede en Puerto La Cruz, estado Anzoátegui, la salida de circulación de su versión impresa.
La directiva del periódico explicó que resultaron muy afectados por la falta de bolívares en efectivo, la inflación desmesurada, el agotamiento del papel periódico, la escalada de los costos de mantenimiento de toda la maquinaria e infraestructura, el desabastecimiento de combustible, y además se sumaron los estragos económicos por la pandemia del covid-19.
«Previendo lo que se avizoraba invertimos en formación de personal en tecnología. Salimos a la calle para no dejar de atender a este pueblo que por más de 60 años ha entendido que El Tiempo es parte de su idiosincrasia», manifestó el rotativo en un comunicado.
El Tiempo dejó de circular diariamente el 27 de abril de 2017 para convertirse en semanario hasta verse obligados a cesar en su versión impresa.
El medio de comunicación cuenta con más de 600.000 seguidores en las redes sociales y buscará dinamizar la cobertura audiovisual con el fin de visibilizar los problemas de cada día en las comunidades de Anzoátegui. La directiva aseguró que seguirán informando mediante su página web.
«Decir adiós siempre es difícil, pero a la vez somos conscientes de que para que el buen periodismo prevalezca hay que transitar las nuevas vías de comunicación», concluye el comunicado del grupo editorial fundado en 1958.
El Tiempo, considerado uno de los más importantes diarios del oriente venezolano y más de 50 años de experiencia en el mercado, fue merecedor del Premio Nacional de Periodismo en los años 1982, 1989 y 1990.