Los dirigentes tradicionales del Partido Comunista de Venezuela (PCV) denunciaron este domingo que la intervención judicial dictada el pasado mes de agosto por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) es un acto “fraudulento”.
En un comunicado, la organización rechazó las acusaciones de corrupción formuladas por el presidente Nicolás Maduro contra sus líderes electos y alertó de una “nueva fase de agresión” contra los comunistas.
“Los venezolanos saben que es Maduro quien conduce un autobús con corruptos e intenta una maniobra (…) para continuar engañando” al pueblo, aseguraron los dirigentes tradicionales.
El grupo destacó que su dirección electa por las bases está conformada por personas “incorruptibles y leales a la clase trabajadora”.
Henry Parra, quien se ha identificado como dirigente nacional del PCV e introdujo un amparo constitucional en contra del partido, fue designado por el Supremo como presidente de la nueva junta directiva de la organización.
El PCV es la formación más antigua del país y acompañó al chavismo en su ascenso al poder en 1999, tras lo cual mantuvo una cercanía con el Gobierno que se rompió en los últimos años, cuando se volvió crítico de Maduro.