Al cumplirse siete meses de la detención arbitraria del periodista y defensor de derechos humanos Carlos Julio Rojas, dirigentes gremiales y activistas solicitaron nuevamente su libertad.
“Su detención fue un abuso, un atropello. Nunca mostraron una orden de aprehensión; los funcionarios ni siquiera estaban identificados”, rememoró Francy Fernández, esposa del comunicador.
El periodista y defensor de derechos humanos fue encarcelado el 15 de abril cuando caminaba en compañía de su esposa cerca de su residencia, en la Candelaria (Caracas). Ya lleva siete meses recluido en la sede del Sebin en el Helicoide.
“Queremos exigir la justa libertad de nuestro amigo y compañero periodista Carlos Julio Rojas”, remarcó la docente Gricelda Sánchez, presidenta de Fordisi. “Carlos Julio siempre se ha caracterizado por luchar por los beneficios de los caraqueños”.
Rojas es dirigente comunitario y secretario general adjunto de la seccional Caracas del Colegio Nacional de Periodistas. “Ha luchado durante años por la recuperación y el rescate de la democracia venezolana”, resaltó Sánchez.
Un preso de conciencia
El abogado Eduardo Torres forma parte de la defensa privada de Carlos Julio Rojas, defensa que no ha podido ser juramentada porque el tribunal de la causa impuso la defensa pública. “Seguimos exigiendo el acceso a la justicia, el debido proceso, el derecho a la defensa”, subrayó Torres.
Rojas es “un preso de conciencia, porque defiende la propiedad privada, defiende los derechos humanos; él no le hace daño a nadie”, enfatizó su esposa. Fernández consideró que el gobierno lo mantiene en prisión “porque es un hombre y un activista que hace el bien”.
Durante el tiempo de reclusión en el Sebin “Carlos Julio ha pasado por muchas dificultades: desde encontrarse con las personas que lo acusaron bajo mentiras, hasta los límites que han puesto a sus visitas; el día que quieren, le limitan las llamadas, aun cuando la comunicación con su familia es un derecho”.
“Carlos Julio no ha cometido ningún delito”, reiteró Fernández. “Hago un llamado al Estado venezolano: no se castiga al que hace el bien, se castiga al que hace el mal. Y Carlos Julio hace el bien”.
Carlos Julio Rojas “no ha cometido delitos” y debe otorgársele la libertad plena, demandó el abogado Eduardo Torres.