Deudas y firmas de contrataciones colectivas pendientes durante todo el 2022, son el caldo de cultivo perfecto para que los gremios docentes de Nueva Esparta, dependientes tanto del Ministerio para la Educación como del Ejecutivo regional, comiencen a afinar medidas de presión para hacerse escuchar.
Jesús Quijada, secretario general de la Federación Venezolana de Maestros capítulo Nueva Esparta, adelantó la posibilidad de un paro docente en caso de no ser atendidos sus reclamos.
Insistió en que los gremios educativos vislumbran conflictos al inicio del año debido a los bajos salarios y la crítica situación de la infraestructura escolar.
“Estamos haciendo lo que tenemos que hacer antes del 15 de enero. El cronograma tentativo establece llamado a asamblea y de allí, acciones que pudieran derivar en un paro si se mantiene la indiferencia patronal”, advirtió Quijada.
Recalcó que la deserción del personal por los bajos salarios y la deteriorada infraestructura educativa, siguen siendo la principal preocupación de los gremios que conforman el magisterio neospartano.
Además, el dirigente magisterial exigió a la Gobernación de la entidad el pago de las prestaciones sociales de más de 700 docentes regionales que se acogieron a la jubilación entre los años 2017 y 2021, y que hasta las últimas horas del 2022 estuvieron esperando sus pagos.
