Lluvias torrenciales provocaron inundaciones en el norte de China que han dejado al menos un muerto y dos desaparecidos, informan este lunes medios locales.
El hecho ocurrió el domingo en la región autónoma de Mongolia Interior. Además, intensas lluvias azotaron partes de la provincia sureña de Hunán durante el fin de semana, arrastrando coches por las calles, recoge CGTN. En la provincia suroccidental de Guizhou también cayeron fuertes aguaceros que inundaron carreteras y dejaron atrapados a residentes. Asimismo, corrimientos de tierra en la provincia de Sichuan mataron a varias personas la semana pasada.
En medio de condiciones meteorológicas extremas, los equipos de rescate de varias provincias evacuan a residentes para ponerlos a salvo de las inundaciones y los corrimientos de tierra.
Mientras tanto, el norte de China sigue sufriendo temperaturas inusualmente altas. El domingo el país registró el mayor número de días calurosos de las últimas seis décadas, informan medios locales citando al Centro Nacional del Clima de China.
Se trata de una media de 4,1 días en los que las temperaturas superaron los 35 grados centígrados, la cifra más alta desde que comenzaron los registros en 1961. La capital, Pekín, ha sido la más afectada, seguida de la vecina provincia de Hebei y el municipio de Tianjin.
«Esta ronda de calor es fuerte, duradera y generalizada», declaró Zhao Wei, jefe de predicción de la Estación Meteorológica de Pekín. «La razón es que la región de Pekín-Tianjin-Hebei está bajo una masa de aire más cálido desde hace unos días y su influencia durará un tiempo», agregó.