Las confesiones que el príncipe Harry (38) hizo en su libro de memoriasSpare no sólo causaron la molestia de la Familia Real y los habitantes del Reino Unido, también podría haber causado serias consecuencias legales que dificultarían su residencia en Estados Unidos.
De acuerdo con un experto legal que consultó el medio estadounidense Page Six, el Príncipe Harry podría perder su derecho a vivir en EEUU por ser demasiado sincero sobre su consumo de drogas en el pasado.
“Admitir el consumo de drogas suele ser motivo de inadmisibilidad. Eso significa que el visado del príncipe Harry debería haber sido denegado o revocado porque admitió haber consumido cocaína, setas y otras drogas”, afirma la ex fiscal federal Neama Rahmani.
Rahmani, presidenta de West Coast Trial Lawyers, aseguró que ser de la realeza no salvaría a Harry ya que no hay excepción sobre el uso recreativo de sustancias iliscitas.