Un año después de su renuncia por un escándalo de corrupción en Venezuela, el exministro de Petróleo Tareck El Aissami ha desaparecido de la vida pública, generando incógnitas sobre su paradero y posible investigación en el hermético régimen chavista.
El poderoso exministro, sancionado por Estados Unidos, se vio envuelto en una trama de corrupción relacionada con la venta de crudo a través de criptoactivos, que buscaba evadir sanciones financieras de Washington. Tras su dimisión en marzo de 2023 y la detención de 61 funcionarios y empresarios por un desfalco de más de 15.000 millones de dólares, El Aissami ha permanecido en el anonimato.
Teorías conspirativas han surgido sobre su paradero, desde estar detenido en una mansión militar en Caracas hasta problemas de salud. El gobierno guarda silencio al respecto, manteniendo un hermetismo informativo.
Mientras el Ministerio Público ha llevado a juicio a 22 de los detenidos, incluidos colaboradores cercanos de El Aissami, las audiencias aún no tienen fecha. Analistas sugieren que su salida del poder podría deberse a una purga interna en el chavismo, en medio de investigaciones judiciales sobre corrupción en la industria petrolera venezolana.
El legado de El Aissami, quien asumió el ministerio de Petróleo en plena pandemia, ha dejado interrogantes sobre el alcance de la corrupción y la reestructuración de la producción petrolera, que continúa lejos de sus niveles históricos.
Tareck El Aissami
El Aissami, de 48 años, es señalado por la Oficina de Control de Activos de Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EEUU desde 2017 de ser “narcotraficante especialmente designado”.
El abogado, criminólogo y político venezolano con ascendencia siria y libanesa, exvicepresidente de la República Bolivariana de Venezuela, y que en el momento de haber sido ministro de Interior y Justicia constituyó una estructura de inteligencia paralela, a su servicio personal, empezó a amasar fortuna desde el momento de haber sido electo gobernador del estado Aragua.
En su declaración de renuncia dijo que en su condición de “militante revolucionario” se ponía a disposición de la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para “apoyar” la “cruzada” contra los “antivalores” emprendida por el presidente Nicolás Maduro.
Después de ese momento, no se sabe más nada de él. Ninguna aparición pública, puros rumores, especulaciones, y en medio, la detención de más de 60 funcionarios y empresarios vinculados a una trama de corrupción desarrollada bajo el uso de esquemas financieros alrededor de criptoactivos y los recursos de PDVSA, para “evadir” las sanciones.
¿Dónde está El Aissami?
Desde “informaciones” de que se hizo una cirugía plástica y está en Siria o Turquía, hasta que lo ven trotando por Fuerte Tiuna, o está muerto, medios, periodistas y políticos han especulado sobre el tema.
Una información que llegó hace 6 meses a nuestra redacción de Punto de Corte, que hemos podido validar con otras fuentes del chavismo, nos corroboran que Tareck El Aissami se encontraba para ese momento en una celda 2×2 en Fuerte Tiuna, en “condiciones no muy confortables”.
Una persona que lo visitó y logró conversar con él afirma a nuestra fuente que se encontraba “en estado de desesperación”, ya que Nicolás Maduro no decide que hacer con él mientras los días pasan.
Nuestra fuente advierte que la causa de su detención “no solo gira en torno al tema económico y de corrupción, sino de un celo político, e incluso de algunos movimientos de El Aissami que se hicieron sospechosos para la estabilidad del gobierno”.
