Nuevamente las Fuerzas Armadas de Ucrania planificaron un ataque milimétrico contra un objetivo en territorio ruso. Un dron penetró la frontera en la región de Rostov y logró impactar contra una refinería.
Vasili Golubev, gobernador de la zona, confirmó el hecho, al afirmar que encontraron fragmentos del aparato, sin embargo no especifíco el origen del mismo.
El incendio fue sofocado y el personal de la planta fue evacuado sin que se registraran víctimas.
Imágenes difundidas en las redes sociales mostraron un dron volando hacia la refinería, ubicada a solo 8 km (5 millas) de la frontera con Ucrania, antes de que una gran bola de fuego y humo negro se elevara hacia el cielo.
Algunos especialistas que analizaron las imágenes dijeron que el dron no parece ser un aparato de fabricación ucraniana PD-1/2. Se trataría por el contrario de un dron barato personalizado para explotar en el impacto. Esto supondría una novedad en la estrategia ucraniana.
La refinería tiene una capacidad anual de hasta 7,5 millones de toneladas y comenzó a operar en 2009.
Rusia también está investigando la causa de un gran incendio que estalló en una instalación de almacenamiento de petróleo en la ciudad de Bryansk, 154 km al noreste de la frontera con Ucrania, a fines de abril.
Los ataques con misiles en territorio ruso se han vuelto más frecuentes después de que las fuerzas de Moscú se retiraran de Kiev a finales de marzo y la contraofensiva de las fuerzas ucranianas se acercara a la frontera rusa.
Varias regiones fronterizas han elevado sus niveles de amenaza terrorista en respuesta a los ataques.
Ucrania no se ha atribuido la responsabilidad de los ataques en territorio ruso, pero tampoco ha negado formalmente estar detrás de ellos.
