El papa Francisco ha reclamado este miércoles que “el trigo, alimento básico, no se use como arma de guerra” y ha pedido que se levanten los bloqueos que impiden la exportación de cereal ucranio a través del mar Negro porque la alimentación de millones de personas depende de esa materia, especialmente en los países pobres.
“Existe gran preocupación por el bloqueo del trigo, del que dependen millones de personas, especialmente los países más pobres”, ha dicho Francisco al final de la audiencia general celebrada este miércoles en la plaza de San Pedro. El pontífice ha realizado un firme llamamiento para que se lleven a cabo todos los esfuerzos necesarios para resolver esta cuestión y «garantizar el derecho universal de poder nutrirse».
Este martes, los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) exigieron a Rusia que levante el bloqueo de los puertos ucranios en el mar Negro y permita las exportaciones de alimentos desde este país, ante la amenaza de una crisis alimentaria global. En las últimas semanas, el asunto se ha convertido en una de las derivadas más importantes del conflicto. Turquía está mediando entre Moscú y Kiev para abrir un corredor para los barcos mercantes, al igual que la UE.
La Federación de Rusia es el mayor exportador mundial de trigo, mientras que Ucrania es el quinto mayor exportador y en conjunto, proporcionan el 19% del suministro de cebada, el 14% del trigo y el 4% del maíz del mundo, representando más de un tercio de las exportaciones mundiales de cereales, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
En la imagen, de Remo Casilli para Reuters, el papa Francisco durante su audiencia general este miércoles en la plaza de San Pedro del Vaticano.