En los últimos años, la importación de medicamentos ha sido clave para combatir la escasez en el sector, sin embargo, esta práctica ha permitido también el ingreso de productos sin control sanitario, representando un peligro para la sociedad venezolana, según informó el Colegio de Farmacéuticos del estado Lara.
«Es muy normal que lleguen los pacientes acusando que los medicamentos que compraron con esas características no ejercen la debida acción terapéutica, igualmente el gremio médico previene a los pacientes diciendo que se tomen ciertos medicamentos, pero que no sean fabricados en la India, por ejemplo, como hay otros que tienen efectos secundarios marcados», dijo el doctor Omar Álvarez, presidente del gremio de farmacéuticos.
Explica que para el año 2017 hubo una profunda escasez de medicamentos en el país y el Gobierno nacional intentó paliar el desabastecimiento con el ingreso de medicamentos traídos desde China, Turquía, India y Brasil porque los laboratorios venezolanos no estaban funcionando y aunque los anaqueles se comenzaban a ver más llenos, en su mayoría no cumplían con el control sanitario.
«El traer este tipo de medicamentos se convirtió en una política del Ministerio de Salud para poder abastecer el mercado que estaba desabastecido en un 85%, hicieron un paréntesis durante el cual permitieron la entrada de medicamentos sin que pasaran por el control del instituto, que es como lo determina la Ley del Medicamento», dice.
