La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) condenó la consumación del robo del diario El Nacional de Venezuela por parte de la justicia. Su edificio sede pasa a formar parte del patrimonio de Diosdado Cabello.
Tras una operación cuestionable, el 27 de enero la jueza Lisbeth del Carmen Amoroso Hidrobo, del Tribunal Tercero de Primera Instancia Civil, Mercantil, de Tránsito y Bancario del Área Metropolitana de Caracas, adjudicó directamente a Cabello, vicepresidente del partido gobernante, la sede y el terreno de El Nacional. La medida se ejecutó de forma irregular, al no informarse públicamente «el día, hora y monto mínimo para que los interesados hicieran sus ofertas», en violación a las reglas procesales que exige la ley. Tampoco fue notificado el representante judicial de El Nacional.
Robo a El Nacional
Jorge Canahuati, presidente de la SIP, condenó «la consumación del robo del siglo al periodismo independiente, algo que solo puede pasar en una dictadura». El CEO del Grupo Opsa, de Honduras, agregó que «la dictadura ha utilizado todas sus armas para cerrar medios y amordazar a la prensa durante estos 20 años, pero esta estrategia político-judicial es tal vez la más creativa».
El 16 de abril de 2021, el Tribunal Supremo de Justicia condenó por difamación a El Nacional y a pagarle a Cabello una indemnización de 13,2 millones de dólares. Cabello había demandado al diario y a su director, Miguel Henrique Otero, por publicar un reportaje del periódico español ABC en el que se lo vinculaba con el narcotráfico. El 14 de mayo de 2021, un juez ordenó el embargo de las instalaciones y los bienes del diario.
Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, reiteró: «Una vez más observamos la falta independencia de un sistema de justicia subordinado al poder político. Sin ningún pudor, de forma abusiva y de espalda a lo que dicta la ley, satisface la pretensión de un político que venía fervientemente amenazando con hacer desaparecer al diario».
Canahuati y Jornet, director del diario La Voz del Interior, de Argentina, coincidieron en señalar que la entrega de la sede del diario a Cabello es el «la culminación de una venganza política». Agregaron que «este grave atropello del gobierno contra El Nacional y otros 100 medios independientes ya desaparecidos, manchará la historia de Venezuela».
El Nacional se publica en línea desde hace años, aún antes de la confiscación de los bienes, debido a las restricciones impuestas por el gobierno, entre ellas, la falta de acceso a la importación de papel y otros productos para la impresión.
