España y Brasil coincidieron hoy en reclamar una investigación independiente, clara y transparente» sobre la muerte del concejal opositor venezolano Fernando Albán mientras estaba detenido.
Así lo expresaron en rueda de prensa conjunta los ministros de Asuntos Exteriores de España, Josep Borrell, y Brasil, Aloysio Nunes, quienes analizaron la situación en Venezuela y la necesidad de dar una solución a la crisis política y social venezolana.
«Creo que puede ser de interés de todos una investigación independiente y realizada de la manera más clara y transparente para el mundo, también para Venezuela«, afirmó Nunes.
«No tenemos nada contra la actuación de la Fiscalía venezolana, pero creemos que este caso en particular necesita una investigación de carácter independiente», confirmó Borrell, tras recordar que España llamó a consultas al embajador venezolano para que explicase las circunstancias de la muerte de Albán.
El ministro español aseguró que está a la espera de las informaciones que pueda aportar el embajador ya que «Venezuela tiene que dar explicaciones al mundo porque normalmente la gente no se tira por las ventanas».
Preguntados por que ni España ni Brasil se hayan sumado a la denuncia interpuesta ante el Tribunal Penal Internacional, ambos coincidieron en que ya existe una investigación que se vería entorpecida, que la base jurídica sobre la que se establece la denuncia es «poco nítida», y que el proceso «entorpecería» el diálogo político.
Borrell explicó que el secretario de Estado de Cooperación de España para Iberoamérica, Juan Pablo de Laiglesia, se encuentra en Venezuela estos días estableciendo una «toma de contacto y exploración» con parte de la oposición que está en el país.
De Laiglesia también está hablando con el gobierno venezolano y con los empresarios españoles con intereses en Venezuela como parte de un viaje que «está siendo tan intenso que incluso retrasa su regreso», señaló el ministro español.
Por su parte, Nunes explicó que Brasil defiende una «solución pacífica de los problemas venezolanos entre los venezolanos», por lo que no está a favor de la intervención extranjera, aunque consideró que si finalmente el candidato derechista Jair Bolsonaro gana las elecciones presidenciales brasileñas, «mantendrá una postura más dura con Venezuela«.
Brasil, que tiene más de 2.200 kilómetros de frontera con Venezuela, ha recibido en los últimos tres años la llegada de 150.000 venezolanos en busca de asilo, una inmigración que ha sido rápidamente asimilada, señaló Nunez.
Ambos países mantienen un diálogo fluido sobre temas bilaterales como el control de fronteras, la lucha contra el crimen transfronterizo o problemas sanitarios comunes, que no se ha visto entorpecido por la situación política de Venezuela. EFE