El expresidente fue citado a declarar en una corte federal de Miami el 13 de junio. Se espera que ingrese por un estacionamiento subterráneo, se le tomen huellas, fotos, y aún no se determina si será esposado o no para comparecer ante las autoridades.
A pocas horas de su aparición en la corte, el ambiente a los alrededores del lugar es de reforzada seguridad.
“Los ojos del mundo van a estar aquí en Miami y las medidas de seguridad tienen que ser fuertes”, opinó Manuel Ortega, exagente del Buró Federal de Investigaciones (FBI).
Los controles serán estrictos para esta, su primera audiencia ante las nuevas acusaciones. Se espera que Trump estará custodiado por aire y tierra.
“Los cielos van a están controlados, alrededor de la fiscalía, las cortes», todo tendrá máxima seguridad, explica el ex agente Ortega.
Agencias del orden local y federal en conjunto trabajan para concretar un plan de acción que evite cualquier situación que ponga en peligro la integridad del expresidente y de la población civil.