A falta de 100 días para el inicio del Mundial de Qatar, adelantado ayer jueves del 21 al 20 del próximo noviembre, el país árabe espera con expectación el comienzo de la histórica cita con todas sus infraestructuras terminadas a falta de inaugurar el 9 de septiembre el estadio de Lusail, el de mayor capacidad con 80.000 localidades y que será el escenario de la gran final del próximo 18 de diciembre.
Un encuentro al que las 32 selecciones iniciarán su camino un día antes de lo previsto en un cambio realizado por la FIFA para que sea, como es tradición, la anfitriona quien inaugure la competición en un encuentro que le enfrentará a Ecuador en el estadio Al Bait.
“La Copa Mundial de la FIFA 2022 dará comienzo con una celebración aún mayor para los aficionados cataríes y de todo el mundo. El domingo, 20 de noviembre, los anfitriones se verán las caras con Ecuador a las 19:00 hora local (+3 GMT), en el que será el único encuentro del día”, comunicó el organismo.
El adelanto no supone ningún traspié para Qatar en cuanto a organización e infraestructura, ya que se finalizó la construcción de todas con margen.
Ocho estadios albergarán los encuentros del Mundial de Qatar 2022, seis de ellos de nueva construcción y dos remodelados -Ahmad Bin Ali y Khalifa-, con la sostenibilidad como idea central a la vez que representan la historia del país árabe y ponen su mirada en el futuro.
Tres de ellos -974, Ciudad de la Educación y Al Thumama- fueron diseñados por el estudio de arquitectura español Fenwick Iribarren, y el gobierno de Qatar ya se comprometió a donar parte de su infraestructura a países subdesarrollados.
El último en ser inaugurado será el estadio Lusail, el estadio de la final. Lo hará el próximo 9 de septiembre cuando acoja el partido de la Supercopa entre el campeón de la Saudi Pro League y el ganador de la Egyptian Premier League; en un día que también contará con programa festivo para celebrar el acontecimiento.
El recinto, situado en la ciudad de Lusail, a 15 km al norte del centro de Doha, albergará partidos durante todo el torneo, y se estrenará con el partido del Grupo C entre Argentina y Arabia Saudí del 22 de noviembre.
“Encarna la ambición y la pasión de Qatar por compartir la cultura árabe con el mundo”, destacó la organización, y su diseño está inspirado en el juego de luces y sombras que caracteriza a la linterna del ‘fanar’. Su forma y fachada hacen eco de los intrincados motivos decorativos de cuencos, vasijas y otras piezas de arte encontradas en todo el mundo árabe e islámico durante el surgimiento de la civilización en la región.
Lusail será el lugar dentro de exactamente 100 días de la gran final de un Mundial único en la historia. El primero en invierno y en un país árabe que espera acoger en torno a 1,2 millones de espectadores, por lo que, además de los hoteles existentes, apostaron por innovar y optimizar infraestructura contando con unas 4.000 habitaciones en cruceros que servirán de alojamiento durante el torneo.