Filipinas autorizó el uso de emergencia de la vacuna Moderna contra el covid-19, lo que permite incluirla en el plan de inmunización del gobierno de Rodrigo Duterte, que sufrió muchos retrasos.
«Después de una revisión rigurosa y exhaustiva de expertos y médicos de los datos actualmente disponibles, la Administración sobre Alimentos y Medicamentos (FDA) otorga la autorización para uso de emergencia de la vacuna Moderna», señaló el martes en una rueda de prensa online el director general de la FDA, Eric Domingo.
Domingo apuntó que la tasa de eficacia de esa vacuna del laboratorio estadounidense es de 94% frente al covid-19 y que los beneficios de su uso son superiores a los riesgos conocidos y potenciales.
Filipinas ha realizado un pedido inicial de 200.000 inyecciones de covid-19 al gigante farmacéutico estadounidense y espera recibirlo en junio; aunque en total cuentan con lograr unos 20 millones de vacunas Moderna, que se utilizarán entre programas de vacunación públicos y privados.
Por el momento, Filipinas ha administrado 2 millones de inyecciones y 1,7 millones de filipinos han recibido la primera dosis mientras que 320.500 cuentan con las dos en un país con 110 millones de habitantes.
El gobierno tiene el objetivo de vacunar a 70 millones de personas antes de fin de año para lograr la inmunidad de rebaño en Filipinas, que sufre en estos momentos lo peor de la pandemia y acumula más de 1 millón de contagios.
Para poder cumplir con esa meta, Filipinas espera acelerar este mes su plan de vacunación cuando reciba a lo largo de mayo otras 4,5 millones de dosis de Sinovac, 2 millones de Gamaleya y 1,3 millones de AstraZeneca y 2,3 millones de Pfizer.