El Gobierno finlandés anunció este martes su decisión de retirarse de la Convención sobre la Prohibición de las Minas Antipersonales, también conocida como Tratado de Ottawa, a fin de proteger mejor su frontera oriental con Rusia, la más extensa de un país de la OTAN.
De este modo, Finlandia se suma a otros países de la región en su decisión de abandonar este tratado, entre ellos Polonia, Estonia, Letonia y Lituania, que hicieron un anuncio similar el pasado 18 de marzo.
El primer ministro finlandés, Petteri Orpo, avanzó además que el gasto en defensa aumentará hasta alcanzar el 3 % del producto interior bruto (PIB) en 2029 para financiar la compra de este tipo de minas y que se pondrá en marcha una reforma del Ejército de Tierra del país nórdico.
«Me gustaría aprovechar esta oportunidad para subrayar que los finlandeses no tienen de qué preocuparse. Finlandia es un país seguro. Con estas medidas, queremos asegurarnos de que la defensa de Finlandia también esté en buena forma en los próximos años», declaró Orpo en una rueda de prensa junto a varios ministros.
El titular de Defensa, Antti Häkkänen, señaló que la reintroducción de las minas antipersonales permitirá aumentar la capacidad de defensa de Finlandia, ya que son un arma defensiva muy eficaz en caso de una invasión por tierra.
Finlandia fue uno de los últimos países de Europa occidental en ratificar la Convención de Ottawa en 2012, una decisión que le obligó a retirar las miles de minas antipersonales diseminadas a lo largo de la frontera con Rusia desde los tiempos de la Unión Soviética. EFE