El fiscal de la Corte Penal Internacional, Karim Khan, visitó la ciudad de Bucha en Ucrania este miércoles, para corroborar la matanza de civiles en la localidad.
El jurista observó la destrucción que dejó la ocupación rusa en la zona y conversó con los periodistas sobre el asesinato perpetrados por las tropas de Putin.
«Ucrania es una escena del crimen. Estamos aquí porque tenemos motivos razonables para creer que se están cometiendo delitos dentro de la jurisdicción de la Corte Penal Internacional. Tenemos que atravesar la niebla de guerra para llegar a la verdad», comentó.
El tribunal aseguró que, en su encuentro con la fiscal ucraniana, se acordó “profundizar el compromiso y fortalecer aún más las alianzas” porque “son cruciales para lograr la rendición de cuentas de delitos internacionales cometidos en Ucrania”.
La Fiscalía de la CPI abrió el pasado 2 de marzo una investigación en este país y comenzó actividades de recopilación de pruebas.
Ni Rusia ni Ucrania son Estados Parte del tribunal internacional, pero Kiev presentó dos solicitudes, en noviembre de 2013 y en febrero de 2014, con las que aceptó su jurisdicción.
La ocupación rusa de Bucha se saldó con más de 400 civiles muertos, según las autoridades, y sus cuerpos han sido encontrados en sótanos, pisos particulares, en fosas o tirados en la calle.
Hoy, el servicio de inteligencia ucraniano denunció que las tropas rusas pretenden eliminar cualquier tipo de prueba que confirme que han cometido crímenes de lesa humanidad en Ucrania y que para ello emplean crematorios móviles, especialmente en la ciudad de Mariúpol, para no dejar rastro de sus atrocidades, como ha ocurrido supuestamente en Bucha.
EFE