El candidato presidencial de la mayor coalición opositora de Venezuela, Edmundo González Urrutia, se mostró este martes abierto al diálogo «con quien sea», pese a los insultos del presidente y aspirante a la reelección, Nicolás Maduro, quien dijo, recientemente, que «hay un viejo decrépito» en búsqueda del poder, sin mencionar el nombre del abanderado antichavista, de 74 años, como acostumbra a hacer.
«El diálogo es la base de la tranquilidad y normalidad. Si hay que dialogar con quien sea, lo haremos (…) hay que subir el tono del diálogo«, dijo el candidato opositor tras una reunión con pensionados en Caracas, donde destacó la necesidad de revisar «el calendario de malas palabras y groserías».
El mandatario -que se refiere a sus contrincantes para las elecciones del próximo 28 de julio como «patarucos», en alusión a los gallos cobardes que no sirven para la pelea, mientras se autoproclama como el espécimen «fino» del corral y el «único» con capacidad de gobernar- también se refirió a opositores a las autoridades del Gobierno estadounidense como «hijos de su madre».
Además, Maduro y líderes del chavismo suelen llamar a la opositora María Corina Machado, quien apoya la candidatura de González Urrutia, «la sayona», un personaje que, según la literatura oral venezolana, aparece en forma de espectro y castiga a los hombres infieles.
En mayo de este año, González Urrutia prometió que, de ganar las elecciones del próximo 28 de julio, en Venezuela gobernará un presidente que no insultará a sus adversarios políticos.
«Imaginemos por un momento el país que viene: un país en el que el presidente no insulta ni ve a sus adversarios como enemigos», dijo entonces el exembajador, quien representa la antítesis del actual mandatario, tanto en el uso del lenguaje como en las propuestas políticas. EFE