Un organismo de derechos laborales urgió el jueves a los hoteles de Catar, que reclutan a miles de trabajadores extranjeros para el Mundial de fútbol, a evitar el racismo, el exceso de trabajo y el impago de salarios.
AFP
Catar espera recibir a más de un millón de visitantes durante el evento de cuatro semanas, del 21 de noviembre al 18 de diciembre, que contará con una enorme fuerza laboral temporal para ayudar.
Equidem, una organización de defensa de los derechos laborales con sede en Reino Unido, aseguró que los trabajadores en el país del Golfo han enfrentado «seria explotación laboral y violaciones de derechos humanos».
Catar ha enfrentado numerosas críticas por las condiciones de los trabajadores migrantes.
El emirato insiste en que ha hecho mejoras los últimos años, incluyendo un salario mínimo y la eliminación de gran parte de un polémico sistema que otorga poder a los empleadores sobre los derechos de los trabajadores de cambiar de empleo o incluso salir del país.
La FIFA dijo esta semana que Catar aplicó un «proceso de diligencia debida sin precedentes para resguardar los derechos y el bienestar de los trabajadores en 159 hoteles, incluidos todos los que acogerán a los equipos participantes».
Según Equidem, los trabajadores hoteleros, como los de Bangladesh, dijeron a sus investigadores que ganan menos que gente de países árabes por el mismo trabajo.
El grupo señaló que los guardas de seguridad de Kenia dijeron ser presionados a trabajar bajo el calor extremo más que los de otras nacionalidades.
Equidem informó que algunos empleados dijeron que fueron forzados a trabajar horas extras sin cobrarlas, «como robots», y muchos no recibieron salarios ni compensación debida cuando los despidieron durante la pandemia del coronavirus.
La Organización Internacional del Trabajo también buscó mejoras, señalando que 20 hoteles crearon comités para resolver disputas, aunque apuntó que se debe hacer más.