En entrevista con SEMANA, el presidente interino de Venezuela le envió un mensaje al presidente colombiano: “Las relaciones comerciales no se recuperan con sonrisas al lado de violadores de derechos humanos”.
SEMANA: Hablemos de Monómeros, ¿qué pasará con la empresa?
J.G.: Monómeros es una industria de fertilizantes colombo-venezolana, donde Venezuela tiene mayorías. Está protegida por licencias de Estados Unidos para operar luego de las sanciones a Maduro por violación a los derechos humanos. Tenemos tres prioridades: que se mantenga al servicio de los venezolanos y colombianos, sobre todo en un momento difícil, donde la crisis en Ucrania ha disparado los precios de los alimentos, donde los fertilizantes son un requerimiento fundamental en este momento; lo segundo, que siga siendo de los venezolanos al servicio de los colombianos, y tercero, que rinda cuentas de manera transparente. Será decisión del presidente Petro si reconoce al dictador Maduro, lo cual implica algunas consecuencias prácticas: Maduro está sancionado por Estados Unidos, lo cual tiene un impacto si se reconoce directa o indirectamente.
SEMANA: Petro ya tomó la decisión, Monómeros pasará a manos de Maduro.
J.G.: Eso tiene un impacto porque Maduro está sancionado. Entregarle hoy cualquier empresa a Maduro, sea Monómeros o el oro que está en Inglaterra, o Citgo, que está en Estados Unidos, significa financiar directa o indirectamente una dictadura. Para Monómeros implica entrar en el régimen de sanciones de Estados Unidos.
SEMANA: ¿Piensa impugnar la decisión de Petro de entregarle la empresa a Maduro?
J.G.: Nuestra responsabilidad es salvaguardar los activos de los venezolanos y que no caigan en manos de una dictadura que los ha dilapidado en el pasado, como sucedió recientemente con una refinería dominicana. Lamentablemente, la remataron. Nosotros estamos evaluando a nivel jurídico.
SEMANA: Maduro quiere vender Monómeros a Colombia, según Benedetti. ¿Qué opina?
J.G.: Sería la contradicción más grande en la historia, aunque han tenido muchas. Hay un hecho muy claro: con la protección de los activos de Estados Unidos, en el caso de Colombia, con el expresidente Iván Duque se mantuvo tanto Citgo como Monómeros en manos de los venezolanos al servicio de la sociedad colombiana. Vender una empresa sin la autorización del Parlamento o el consentimiento de la mayoría de venezolanos constituiría no solamente un gran acto de hipocresía por parte de Maduro, sino que reflejan claramente lo que son.
SEMANA: Es decir, no está de acuerdo…
J.G.: Monómeros es hoy de mayoría accionaria venezolana, nos ha rendido frutos a los colombianos y venezolanos. No estamos de acuerdo con entregar los activos de Venezuela.