Guerrilleros disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, en territorio venezolano, pidieron en un video a Vladimir Padrino López, ministro chavista de Defensa, cesar el fuego a cambio de entregar a los ocho militares que tienen secuestrados en calidad de rehenes de guerra.
Así lo dijo Javier Tarazona, director de la organización no gubernamental Fundaredes, este martes durante una entrevista con el periodista Sergio Novelli para VPI TV.
«Nosotros el día domingo anunciamos públicamente que los señores Vladimir Padrino López y Remigio Ceballos conocen de un video en el que la guerrilla prácticamente les pide el cese al fuego a cambio de darles los efectivos que están en este momento siendo rehenes de guerra por parte de este grupo terrorista de las FARC en territorio venezolano», afirmó.
Por lo tanto, el activista aseguró que el régimen de Nicolás Maduro sabía de la situación antes de que los guerrilleros publicaran una carta solicitándole a la Cruz Roja Internacional su intermediación y los buenos oficios para realizar la entrega de los uniformados, que fueron secuestrados en un combate el pasado 23 de abril.
Tarazona recordó que desde el 21 de marzo se mantiene un enfrentamiento en Apure entre los disidentes del Décimo Frente de las FARC y la Fuerza Armada Nacional Bolivariana. «Lamentablemente estos grupos siguen expandiéndose. El estado Sucre es la entidad número 21 donde se cuenta con presencia del ELN y las FARC», explicó.
El viernes 23 de abril, cuando los guerrilleros secuestraron a los militares venezolanos, en horas de la tarde, luego de confrontaciones en los sectores La Osa y Tres Esquinas, en donde hubo bombardeos, se desplazaron dos helicópteros no artillados con una orden de operaciones de acabar con un laboratorio clandestino de procesamiento de drogas que existía en La Capilla.
«Iban 38 militares a bordo de los dos helicópteros; 30 militares descendieron y cuando estaban en el terreno los sorprendieron por todos los costados. Ellos indican que por más de 300 guerrilleros, con un poder de fuego muy alto y con francotiradores. Un militar de apellido Pérez Torres ordenó que se retiraran los helicópteros para evitar la caída de las aeronaves y estos efectivos quedaron en pleno lugar de combate», narró.
«Varios militares lograron salvar su vida y, caminando por sus propios medios, durante tres y cinco días, lograron buscar auxilio. Algunos llegaron al sector La Charca, a una comandancia militar; otros llegaron al lugar más poblado. A algunos incluso la guerrilla los despojó de fusiles, de absolutamente todo. Tenemos el caso de un militar al que le tocó entregar el fusil y el general, cuando llega a la comandancia y le informan, lo golpeó y lo mandó preso», agregó.
El director de Fundaredes indicó que, además de los ocho militares secuestrados, hay otros tres que están desaparecidos. Se tratan del sargento de tercera Dani Vásquez, el sargento primero de fragata Abraham de Jesús Belisario Bastidas, y otro funcionario que no ha sido identificado.
