El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, «insta a los talibanes a que revoquen inmediatamente la decisión» de prohibir a las mujeres afganas que trabajen para Naciones Unidas en el país asiático, informó este miércoles su portavoz en un comunicado.
Estas mujeres «son esenciales» para las operaciones humanitarias de la ONU, por lo que la «aplicación de esta decisión va afectar a la población afgana», que en buena parte «depende de esta asistencia», agregó Stéphane Dujarric.
La ONU anunció el martes que el gobierno talibán ha prohibido a las mujeres trabajar en la organización en todo el país, lo que según el coordinador de la ayuda humanitaria del organismo en Afganistán, Ramiz Alakbarov, va «en contra de la Carta de Naciones Unidas» y «viola» los derechos de la mujer.
De las 3.900 personas que trabajan para la ONU en Afganistán, unas 600 son mujeres y de ellas 400 son afganas, según la ONU.
En este país víctima de una de las peores crisis humanitarias del planeta, unos 23 millones de personas dependen de la ayuda humanitaria, según la ONU.
«En la historia de Naciones Unidas, ningún otro régimen había intentado prohibir a las mujeres que trabajen para la organización por el simple hecho de ser mujeres», declaró por su parte la jefa de la Misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (Manua), Rosa Otounbaïeva.
Desde su regreso al poder en agosto de 2021, los talibanes imponen una interpretación rigurosa del islam, como habían hecho antes de ser expulsados del poder hace dos décadas. Por ello, han multiplicado las medidas para cercenar los derechos de las mujeres, a las que se les ha prohibido ir a la universidad y al instituto.
También han sido excluidas de muchos empleos públicos o reciben salarios de miseria. No pueden viajar sin la compañía de un familiar masculino y deben cubrir íntegramente su cuerpo cuando están en espacios públicos.
Guterres también pidió que se retiren «todas las medidas de restricción contra las mujeres y las jóvenes en materia de trabajo, educación y libertad de movimientos».
La medida contra la ONU estuvo precedida el pasado 24 de diciembre de 2022 por otra similar contra las ONG.
«Numerosos donantes y contribuyentes» han suspendido la financiación a los programas de ayuda para Afganistán», advirtió Alakbarov
Hasta el momento el programa de ayuda de la ONU para 2023 solo ha recaudado entre el «3 y 4%» de lo previsto, informó.