Católicos cubanos han reaccionado con indignación y dolor a las declaraciones del papa Francisco sobre su «relación humana» con el general Raúl Castro, en momentos que se cumple el primer aniversario de las históricas protestas del 11 de julio de 2021, cuyos participantes han sufrido la represión del régimen con resultado más de 1.300 detenciones y procesos con condenas desproporcionadas.
«Santidad: hay palabras y declaraciones que duelen más que la represión. Escuche a las madres de los jóvenes presos del 11J y no a los poderosos, se lo debemos al Evangelio. Recuerde el Magníficat. Dígame, Padre, que hago con el sufrimiento de las familias del 11J», escribió el laico católico cubano Leonardo Fernández Otaño en Twitter.
En otro mensaje en la misma red social, Fernández Otaño exigió a Francisco que «pida disculpas a la ciudadanía, el laicado, así como los familiares y centenares de presos políticos que hay en Cuba».
«Gente de #TwitterCuba vamos a mostrarle a Su Santidad nuestra verdadera realidad. ¿Acaso no habla Su Santidad de un proceso de escucha? Pues escuche primero al pueblo y después a los poderosos. El Papa tiene que respetarnos», señaló.
En enero, el profesor de Historia hizo pública en sus redes sociales una carta enviada al Pontífice en la que denunció la represión del régimen contra los manifestantes del 11J y pidió su intercesión, «una palabra suya para la salvación de cientos de jóvenes que terminarán en las cárceles».
«Somos buenos chicos, hemos tendido que cargar con la cruz de los insultos, los golpes, las celdas de aislamiento y el temor de nuestros padres», escribió entonces Fernández Otaño a Francisco, con quien sostuvo una breve conversación durante la visita del santo padre a La Habana en 2015.
El intelectual Dagoberto Valdés también reaccionó de manera similar a las recientes palabras del papa.
«Lamento profundamente las recientes declaraciones del papa Francisco acerca de Cuba. Ahora se puede entender mucho mejor la actitud del episcopado cubano y de la Santa Sede», dijo en una publicación en su perfil de Facebook.
«Es conocida mi pertenencia a la Iglesia Católica, de la cual soy hijo, pero este tipo de pronunciamiento, siempre, pero aún más en este momento que vivimos los cubanos, por lo menos, duele. Roguemos a Dios por Cuba y por la Iglesia», dijo el fundador del Centro de Estudios Convivencia.
«¡Qué asco de Papa! Miren el mensaje que envió a los cubanos por este 11J. Y ojo, que yo soy católico. Tal vez por eso me molesta más. Es una vergüenza este papa rojo», consideró por su parte el periodista Mario J. Pentón.
En palabras de Elena Larrinaga, presidenta de Federación Española de Asociaciones Cubanas y de la Red Femenina de Cuba, la Isla «es un símbolo. Tiene una ‘historia grande’ de totalitarismo y represión», por tanto «en este aniversario del 11JCuba un pronunciamiento claro y de solidaridad era lo esperado por parte de Su Santidad. Una ‘relación humana’ con el pueblo que sufre».
Arturo McFields Yescas, ex embajador nicaragüense ante la OEA que acusó públicamente a Daniel Ortega de dictador, se unió a las críticas de laicos católicos cubanos: «El papa Francisco destacó su amor eterno por Cuba y su ‘relación humana con Raúl’. No condenó 1.400 arrestos, 488 condenas y 700 personas aún en cárcel por el 11 de julio en Cuba», lamentó en su Twitter.
Y añadió: «No esperemos que (Francisco) se pronuncie sobre Nicaragua y el acoso a su iglesia y los 355 asesinatos de la dictadura».