Familiares del general Raúl Baduel, preso político venezolano desde hace casi 10 años, denunciaron que han recibido rumores que indican que dentro de La Tumba murió una persona y hasta el momento no se sabe quién es.
Nota de prensa
“La premura de esta denuncia es exigir una fe de vida de mi papá, el general Raúl Baduel, a quien lo mantienen en asilamiento continúo en la sede del Sebin de Plaza Venezuela, conocida como La Tumba”, denunció Andreina Baduel, hija del militar retirado.
La joven denunció que en lo que va de año solo han podido ver a su padre durante los meses de junio y julio, y por lo tanto no saben si está vivo o muerto. “Exigimos una fe de vida. Esto no es un favor del régimen, es un derecho. Queremos ver a Rául Baduel. El gobierno no solo tiene presos políticos sino también tortura a sus familiares”, agregó.
Por su parte, Margareth Baduel, hija también del preso político, explicó que en total han sido 9 meses de aislamiento entre agosto de 2017 y octubre de 2018. “En La Tumba no hay acceso a la luz solar ni ningún tipo de esparcimiento. En todo este año lo hemos podido ver solamente 24 horas. Nos quitaron la visita familiar. Nos violan también nuestros derechos a no permitirnos la visita. Las pocas veces que nos han permitido verlo solo lo hemos hecho por una hora y mientras somos grabados con cámaras y micrófonos, sin privacidad. Tenemos derecho a ver a nuestro Padre, ya han sido demasiados años que ha estado injustamente preso. Esto es persecución con toda la familia, mi hermano Raúl Emilio Baduel también estuvo injustamente preso 4 años ”, aseguró.
Para la familia de este militar, el gobierno de Nicolás Maduro es el responsable de la vida y estado de salud de Raúl Baduel. Resaltó que los hijos del general acuden todos los días a La Tumba para exigir una respuesta sobre la condición en la que se encuentra el preso político. “Vamos los días de visita familiar, que siempre la suspenden, y los días que no nos corresponde, porque hay un rumor muy fuerte que una persona dentro de La Tumba murió y nos sabemos quién es”.
Esta situación se empeora porque los abogados tampoco tienen acceso. Andreina Baduel detalló que las pocas veces que lo han visto ha sido en un sótano cuatro, donde además hay que pasar cuatro puertas blindadas hasta llegar al área de visitas que tiene cámaras y micrófonos. “Nos montamos en un ascensor para bajar 4 pisos. Todo eso es filmado. Gracias a Dios mi papá es un hombre de mucha templanza. Él no puede compartir con nadie, lo tienen aislado y no tiene ningún tipo de ventilación. Cuando hay aire este es complemente frío y cuando no tiene, es sofocante”.
Andreina Baduel denunció que su papá es hipertenso y no tiene la seguridad que su tratamiento médico le esté llegando a su celda. “Debo denunciar que mi papá se encuentra en un limbo jurídico porque el 28 de febrero le ratificaron la privativa de libertad y fase a juicio y esta es la fecha en que ni siquiera tienen un tribunal asignado. Su jueza, Claudia Pérez de Mogollón, se encuentra de reposo”, detalló.
