Desde el 20 de octubre, el Consejo Nacional Electoral (CNE) se declaró en sesión permanente para llevar adelante el cronograma del referendo consultivo sobre el Esequibo, que se fijó para el 3 domingo de diciembre de 2023.
Al ente comicial, presidido por el excontralor Elvis Amoroso, le llevó tres días aprobar las cinco preguntas propuestas por la Asamblea Nacional (AN) de 2020, poder que convocó la consulta, según lo previsto en la Constitución (artículo 71).
Este calendario, que se publicó en la página web del CNE, contempla etapas como la campaña institucional y comunicacional del referendo consultivo de 42 días (21 de octubre al 1 de diciembre); producción de instrumentos electorales no codificados (16 de octubre al 15 de noviembre) y codificados (3 al 15 de noviembre); auditorías del software y de producción de máquinas de votación, totalización de cuadernos de votación y un simulacro para el 19 de noviembre, entre otras actividades propias de un evento comicial.
Lo que no se incluye es una jornada especial de Registro Electoral (RE). En su lugar solo aparece el corte definitivo que se empleará en esta elección: la fecha que se fijó fue la 22 de octubre. Además, señala la aprobación por parte de la Comisión de Registro Civil y Electoral del CNE y publicación del RE definitivo, ya en la página web, a partir del 29 de octubre.
¿Falta de tiempo?
En el último proceso electoral en el país organizado por el CNE, las elecciones regionales y municipales del 21 de noviembre de 2021, la jornada especial para la inscripción y actualización de datos en el RE fue de 45 días. ¿Por qué el ente comicial se salta el operativo si en teoría le interesa la mayor participación posible en la consulta sobre el Esequibo?.
Consultado por Efecto Cocuyo, el politólogo y experto electoral, Jesús Castellanos Vásquez, señaló que hacer una jornada inscripción y actualización en el RE específica para esta consulta no permitiría celebrarla el 3 de diciembre.
Esto, si se toma en cuenta, explicó, que deben haber lapsos para la formación del RE preliminar, las impugnaciones y la generación del RE definitivo y que impacta en la elaboración de los cuadernos de votación y la carga del sistema de votación automatizado.
«El CNE no hizo una jornada especial de inscripción y actualización del RE para el referendo consultivo del Esequibo, ni dentro ni fuera del territorio nacional, a pesar de ser una consulta de ámbito nacional. El CNE estaba en la obligación de hacerlo, ante los millones de venezolanos no inscritos o actualizados en el RE. En el caso de los venezolanos en el extranjero es aún más grave, pues se excluyó del padrón electoral de este referendo consultivo a los venezolanos inscritos en el RE», expresó.
De acuerdo con organizaciones civiles que promueven la inscripción en el RE, más de3 millones de personas -entre 18 y 45 años en Venezuela- no están inscritas en el padrón y 2 millones de electores necesitan hacer cambios de residencia.
En cuanto a los votantes en el exterior, se estima que cerca de 5 millones tienen derecho al voto, pero el CNE solo reconoce a 107.496 electores de los 5 millones que se calcula están fuera del país, porque no se ha abierto el padrón fuera del territorio venezolano.
«Al gobierno le interesa una participación masiva en el referendo, pero además poder verificar su capacidad de movilización de sus bases y el control social del voto. Ahora, el CNE convoca este referendo de forma rauda como consecuencia del énfasis que establece el régimen, lo segundo era lo más importante», apuntó el experto.
El integrante de la Red de Observación Electoral de la Asamblea de Educación, José Domingo Mujica, consideró que el referendo se hace de manera «acelerada» y no permite un mayor debate sobre las cinco preguntas que se le hacen al elector, a las catalogó de «confusas», además de las implicaciones del «Sí» y del «No».
Recordó que también es un derecho de los ciudadanos proponer preguntas, pero esa posibilidad tampoco la tomó en cuenta el CNE.
¿Cuántos electores pueden votar en el referendo?
El CNE aprobó el corte del RE al 22 de octubre de 2023 para el referendo, en el que podrán votar 20.694.124 electoras inscritos en el RE en territorio nacional. Este padrón no toma en cuenta la migración.
De los 107.496 electores reconocidos por el Poder Electoral en el exterior que elevan el padrón a 21.027.120 votantes, no se dijo nada. El ente comicial igualmente informó que del RE que será utilizado el 3 de diciembre, fueron excluidos 50.591 personas fallecidas.
«Los venezolanos en el exterior tienen derecho a participar en procesos electorales o consultas de circunscripción nacional», recordó Castellanos Vásquez.
También llamó la atención sobre el hecho de que en la página web del CNE aparezcan dos buscadores para el RE, el que siempre ha permanecido fijo y otro para el referendo sobre el Esequibo. El politólogo se pregunta si se debe a la exclusión de los venezolanos en el exterior, así como de los extranjeros que no pueden votar en consultas nacionales.
El CNE informó que para el 3 de diciembre habrá 15.857 centros de votación y 28.027 mesas electorales. Para el simulacro previsto para el 19 de noviembre, serán habilitadas 1.000 mesas en 485 centros electorales en todos los municipios del país.
¿Qué pasó con los 500 puntos para el RE?
Mujica, al igual que Castellanos Vásquez, cuestionó que la jornada especial de inscripción y actualización del RE que inició el CNE desde el 7 de octubre, con 500 puntos itinerantes en todo el país, se suspendió por la convocatoria del referendo, tal como lo confirmara el rector principal del CNE, Juan Carlos Delpino.
El operativo había sido fijado hasta el 17 de noviembre, por lo que se trataba de poco más de 40 días, de los cuales solo se cumplieron menos de 15 días. Organizaciones como Súmate, dedicada a la veeduría electoral, señalaron que la mayoría de la población del país no tuvo acceso a la jornada; sin embargo, hizo posible que el número de electores habilitados aumentara por primera vez en los últimos 2 años de 20.939.510 a 21.027.120 votantes.
Delpino entregó a la Comisión de Registro Civil y Electoral del CNE un documento con las observaciones de las organizaciones civiles y políticas durante el tiempo que duró el operativo del RE. Estas instancias aludieron a la falta de información sobre a la ubicación de los puntos y falta de uniformidad en la solicitud de los recaudos; es decir, se pedían otros como carta de residencia y el único requisito era la cédula de identidad.
Asimismo, se denunció incumplimiento en el horario de funcionamiento y que en algunos casos los agentes de inscripción y actualización solo atendían las solicitudes orientadas a poblar los nuevos centros de votación.
Las organizaciones civiles también rechazaron que los puntos se ubicaran en zonas de difícil acceso para los ciudadanos. El rector esperaba que se abriera una segunda jornada del RE.
«La suspensión de la precaria jornada de inscripción y actualización y la no realización de una jornada específica del referendo dentro y fuera del territorio nacional, simplemente recrudece la situación actual en el Registro Electoral, así como los déficits millonarios de inscritos y actualizados dentro y fuera del país», agregó Castellanos Vásquez.
Demanda urgente para 2024
«Es una necesidad imperiosa (abrir el RE) para 2024, con la elección de la Presidencia de la República y elecciones futuras como las de la Asamblea Nacional porque estamos hablando de más de tres millones de nuevos votantes excluidos y dos millones que necesitan actualizar sus datos, además de los que se encuentran fuera del país», alertó Mujica.
Castellanos Vásquez, también exasesor del CNE, recalcó que el RE en Venezuela llega al 2024 con una «enorme brecha» de personas con derecho a votar y no inscritos en el RE o no actualizados, dentro y fuera de Venezuela.
Como pauta el cronograma electoral sobre el Esequibo, este 6 de noviembre el CNE realizó una auditoría del software de máquina de votación en presencia de 15 organizaciones con fines políticos que no identificó y a a las cuales también se les dicta un taller de información financiera electoral entre el 8 y el 10 de noviembre.
Igualmente entre el 5 y el 15 de noviembre las organizaciones políticas, organizaciones del llamado poder popular, además de gremios, sindicatos, universidades, sociedad civil y comunidades indígenas se podrán inscribir ante el CNE para participar en el referendo, tanto en la campaña como con la participación de testigos electorales.
Para este 9 de noviembre está prevista la auditoría del software de totalización. Otras actividades próximas son la acreditación de testigos de las organizaciones políticas y de la sociedad civil que se inscribieron para participar en la campaña del referendo (15 de noviembre) y la producción de las máquinas de votación para el referendo entre el 15 y el 24 de noviembre.
El fantasma de la ANC
Consultados sobre la transparencia de este nuevo proceso electoral, los expertos señalaron que habrá más o menos dudas sobre los resultados en la medida en que organizaciones distintas al chavismo participen en las actividades previstas en el cronograma y en la jornada de votación con testigos en las mesas electorales.
Vale recordar que en la elección de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) en 2017, el CNE totalizó 8 millones de votos (41,53% de participación), en un proceso monocolor en el que la oposición no participó.
Posteriormente, el director ejecutivo de Smartmatic, la empresa a cargo del sistema de voto electrónico empleado en la elección de la ANC y en procesos electorales anteriores, Antonio Mugica, afirmó que la diferencia entre la cantidad anunciada por el CNE tras la jornada electoral y la que arrojó el sistema fue al menos de un millón de sufragios, con lo que dejó entrever que se «abultaron» las cifras de la votación.
