El Colegio Nacional de Periodistas, Seccional Distrito Capital, presentó el reporte de agresiones a periodistas y medios, correspondiente a los meses de agosto y septiembre del 2022. El documento, elaborado por el Observatorio de Seguimiento de Agresiones a Periodistas y Medios del ente gremial, registra 38 casos que atentan contra la libertad de expresión e información desglosados en los siguientes cuatro renglones: impedimento de cobertura (4), cierre de emisoras de radio (20), Intimidación (12) Y hostigamiento (2).
Para Edgar Cárdenas, Secretario General del CNP caraqueño, septiembre fue un mes negro para la radio venezolana, debido al cierre de 20 emisoras por orden de Conatel, 15 en el estado Zulia y 5 en Sucre.
No hay claridad, Conatel no presenta información pública sobre aspectos fundamentales como las concesiones radiales. Según algunos medios afectados, el ente gubernamental no responde las solicitudes oportunamente, lo que impide conocer el status de los trámites.
El dirigente gremial afirmó que esto responde a toda una estrategia que deriva en el cierre de espacios comunicacionales, se mantiene la “insistencia en hostigar a la prensa libre para intentar silenciar la información, cerrando medios, evitando que el ciudadano pueda conocer lo que acontece, además de imponer a través de los medios públicos, una matriz informativa sin apego a la verdad y al interés colectivo”.
Poca tolerancia
En los funcionarios públicos persiste una actitud de poca tolerancia ante la crítica y opiniones. Tal es el caso del Alcalde de El Tigre, estado Anzoátegui, Ernesto Paraqueima, quien hostigó y amenazó a través de un programa de radio al periodista Euclides Sotillo, por cuestionar en su cuenta de twitter un concurso organizado por el despacho municipal.
La Alcaldía oriental había lanzado un casting para mujeres de entre 45 y 60 años que aspiraban a un «cambio de look radical”.
Sotillo criticó dicho concurso, lo que originó un conjunto de ataques e insultos por parte del Burgomaestre.
El periodista ejerció su derecho a opinar libremente y Paraqueima respondió a través del hostigamiento e intimidación, violando derechos fundamentales, como lo son la libertad de expresión y opinión.
Caso similar el de Víctor Cruz, presidente de Teleféricos de Venezuela, quien el 31 de agosto atacó a través de redes sociales al periodista Elvis Rivas , acusándolo de palangrista por una publicación sobre la reapertura del teleférico de Mérida.
Estamos frente a funcionarios con escaso talante democrático, que pretenden intimidar a quienes emitan opiniones o publiquen contenido que no sea de su agrado.
Agresiones a periodistas
Se mantiene la intimidación y hostigamiento en contra de los periodistas, para impedir informen sobre hechos que afectan al ciudadano.
En Barquisimeto, estado Lara, el día 22 de agosto, militares fotografiaron a los periodistas Luis Rodríguez (El Impulso), María Jordán, Lorena Rojas(La Prensa de Lara) y Yelitza Figueroa(Crónica Uno), tratando de impedirles dar cobertura a una asamblea de jubilados de Corpoelec.
El pasado 13 de septiembre, en San Carlos, Cojedes; los periodistas Pilar Guerra (VPI, Mango Noticias) y Alexander Olivera (Notitarde), fueron fotografiados por un sujeto vestido de civil, mientras cubrían reclamo por falta de gasoil.
Durante la reapertura de las fronteras entre Venezuela y Colombia, funcionarios de la GNB, impidieron que el periodista Freddy Ramírez y un reportero extranjero, efectuaran cobertura en el lado venezolano del Puente Internacional Simón Bolívar.
Asimismo el 4 de agosto, en Nueva Esparta, un funcionario del DGCIM prohibió a Gustavo González y Edgar Corzo, trabajadores del equipo de prensa de la gobernación, dar cobertura a un acto organizado por la GNB.
En Táchira, la periodista Zulma López, corresponsal del medio Punto de Corte, fue hostigada por un funcionario del Hospital Central de San Cristóbal, mientras realizaba reportaje por la falta de vacunas BCG en el centro de salud.
La persecución y hostigamiento contra periodistas y medios, afecta la labor de la prensa en procurar mantener a la sociedad informada oportuna y pluralmente.
A esto debemos agregar la impunidad en casos probados de agresiones contra periodistas, que en definitiva envían un mensaje entre líneas de que al periodismo puede someterse de acuerdo al interés de los agresores.
Cárdenas, dijo que los gobiernos democráticos están obligados a promover, defender y proteger los derechos humanos, donde debe existir equilibrio, justicia, bajo el respeto de la constitución nacional, demás leyes de la República así como los acuerdos internacionales.
El gobierno venezolano debe detener su política de agresiones a la prensa libre y garantizar el derecho ciudadano a informar y ser informados, finalizó.
Nota de prensa