Este viernes 25 de noviembre se conmemoró el día internacional para la erradicación de la violencia contra la mujer, las mujeres venezolanas marcharon en Caracas usando alas de mariposa en honor a las hermanas Mirabal asesinadas por el Régimen Dictatorial de Rafael Trujillo un 25 de noviembre de 1960.
Iris De Franca, Coordinadora Nacional del Partido Cambiemos Movimiento Ciudadano y Fundadora del Movimiento Mujeres en Política de Venezuela aseguro que «La violencia contra la mujer sigue siendo uno de los principales obstáculos para alcanzar la igualdad, el desarrollo, la paz en Venezuela y la region; la violencia aleja a la mujer de la participación en espacios de toma de decisión, desde las estructuras político partidistas hasta los cargos de elección popular, incluso en los altos cargos de empresas o medios de comunicacion».
La manifestación contó con la participación mujeres de la sociedad civil, de los partidos políticos, de ONG, sindicatos, de la red de madres cuidadoras y fue acompañada por un número importante de hombres quienes al grito de «mujer vida y libertad» exigían al Estado garantizar la seguridad y la vida de las mujeres venezolanas.
De Franca resalto que en Venezuela la participación política de la mujer en los espacios de toma de decision no supera el 35% aunque en las bases tiene la mayor presencia, también que «no solo la violencia nos aleja del poder, existen otras barreras como «ser madres cuidadoras y no tener remuneracion por esas dobles y triples jornadas laborales o la falta de financiamiento a los liderazgos femeninos».
Para la dirigente de la tolda morada, «la violación de los derechos de la mujer no discrimina, pues la violencia toca a mujeres de todos los sectores y de todas las tendencias políticas; no importa si eres política, diputada, campesina o maestra… Incluso no importa si eres chavista, opositora, independiente, o ni ni… el Estado no garantiza nuestra seguridad o protección, no garantiza la justicia, ni nuestra vida».
Las mujeres cerraron el encuentro con la lectura de un petitorio, que incluía la exigencia a los partidos políticos a tener que protocolo de violencia de género para garantizar que los casos de violencia contra la mujer serán atendidos debidamente y además le solicitan al CNE que haga de carácter obligatorio la consignación de estos protocolos ante sus oficinas.